Tras asesorarse la Organización Mundial de la Salud sobre la gravedad de la amenaza sanitaria que supone la continua propagación de la enfermedad por el virus de Zika en Latinoamérica y el Caribe, expertos coinciden en que hay motivos convincentes para sospechar una relación causal entre la microcefalia y la infección del virus en el embarazo.

Fueron 18 expertos y asesores de la OMS los que evaluaron el grado de la amenaza, centrándose en el aumento de casos detectados de malformaciones congénitas y complicaciones neurológicas, y estas son 3 de las cosas que más les preocupan:

 

1. La posible asociación de la infección a malformaciones congénitas y síndromes neurológicos;

2. La posibilidad de que siga su propagación internacional, dada la amplia distribución geográfica del mosquito vector;

3. La ausencia de inmunidad en la población de las zonas afectadas recientemente; sumado a la inexistencia de vacunas, tratamientos específicos y pruebas de diagnóstico rápido.

 

La preocupación es grande, igual que la incertidumbre, admite la OMS, pues abundan las preguntas y se necesitan obtener rápidamente algunas respuestas.