Facebook le declara la guerra a la posverdad evitando propagar noticias falsas
Próximamente la red social más grande del mundo, Facebook, estrenará una función que permitirá a los usuarios reportar aquellas noticias que considere falsas (fake news) o que son tratadas de una manera deshonesta. Dicha actualización comenzará a llegar paulatinamente a todo el mundo y significa una declaración de guerra a la Era de la Posverdad. […]
Próximamente la red social más grande del mundo, Facebook, estrenará una función que permitirá a los usuarios reportar aquellas noticias que considere falsas (fake news) o que son tratadas de una manera deshonesta. Dicha actualización comenzará a llegar paulatinamente a todo el mundo y significa una declaración de guerra a la Era de la Posverdad.
Esta herramienta marcará algunas noticias como cuestionadas (o disputed, en inglés), con ello se busca que la información fraudulenta deje de propagarse por esta red social, aunque solo en Estados Unidos se revisarán una a una las noticias potencialmente falsas.
“Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”
Pareciera que esta frase de la primera película de Spider-Man (dónde sale Tobey Maguire) es algo trillada, pero lo cierto es que no hay una manera más precisa de simplificarlo. Resulta que acá el usuario también tendrá una parte de responsabilidad en la cadena de extender una mentira, que dicho sea de paso, podría acarrear consecuencias graves en caso de que se trate de un intento de sabotaje.
Para ello Facebook ha publicado un decálogo de buenas prácticas para que, antes de darle al botón de compartir (y alimentemos una idea falsa) podamos establecer con criterio si lo es o no. Estos serían los consejos:
—Un titular serio. Primero lo primero. Facebook recomienda ser prudentes ante titulares llamativos o con exclamaciones, algo que es bastante inusual en los medios de comunicación serios. “Si la información suena increíble, es que probablemente lo sea”, apunta el decálogo.
—Verifica la URL. Muchos sitios web de noticias falsas simplemente han cambiado una letra a una url de un medio conocido, con lo que prestar atención o compararlas puede ayudarnos a descubrir que lo que vamos a leer no tiene fiabilidad.
—Las fuentes son importantes. ¿Quién está escribiendo el artículo? Los periodistas tienen una reputación, sea mejor o peor, y no está en el interés de ninguno mancharla escribiendo historias falsas a propósito. Si la noticia llega escrita por redacción o algún tipo de asociación, valdría la pena echar un vistazo general a la página web, para ver qué tipo de información es la que ofrecen.
—Formato inusual. Los sitios web de noticias falsas a menudo están llenas de publicidad, la lectura se hace complicada y, por si fuera poco, tienen muchos errores ortográficos.
—Presta atención a las imágenes. Si la historia es falsa, muy probablemente lo sean también las fotografías que la acompañan. El hecho de que puedan ser reales pero estén sacadas de contexto confunde también al lector. Google Images permite buscar arrastrando directamente una fotografía a la barra de búsqueda para saber qué es en realidad. Una buena forma de comprobar si las imágenes se están utilizando correctamente en un sitio web.
—¿Cuadran las fechas? Las fechas, a menudo, están alteradas en una web de noticias falsas, o los sucesos de los que hablan ocurrieron hace tiempo. Por ello, muchas veces se omite información de cuándo tuvieron lugar ciertos eventos.
—Comprueba la evidencia. Siempre el autor o periodista en este caso se tiene que haber basado en información de algún experto o en las declaraciones de una tercera persona, entonces aparecerá en otra parte por Internet: si alguna fuente no es real o no es fácilmente accesible si la buscamos en Google, entonces, quizás estemos delante de una noticia falsa.
—Busca en otros medios. Generalmente la agenda pública es evidente y a menudo vemos cómo varios diarios publican informaciones parecidas de un mismo hecho. Esto aporta veracidad a la noticia. Si únicamente una web lleva ese artículo sin difundirlo como exclusiva o si nos percatamos que no va con el concepto del sitio web, puede indicarnos la falsedad de la historia que estamos a punto de leer.
—Solo es humor. Muchos usuarios de Facebook no prestan atención a la página de la que salen las noticias y dan por verdaderas historias que son parodias, chistes o bromas. Parecen tan reales que no valoramos que puedan ser mentira… Hasta que comprobamos que las han escrito desde El Deforma, por ejemplo.
PARA SABER:
Desde noviembre de 2016, Facebook impulsa dos proyectos para promocionar el periodismo de calidad: el Facebook Journalism Project, una colaboración con varias entidades periodísticas que gestiona la Universidad de Columbia, y del News Literacy Project, una iniciativa pensada en principio para ayudar a los adolescentes a familiarizarse con las noticias, pero cuyos principios piensan recordar a un público más amplio.
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