En virtud de que en Sinaloa el 85 por ciento de las llamadas que se recibieron en el mes de abril resultaron falsas, la diputada Karina Millán Bueno propuso al Congreso del Estado legislar para que estas personas irresponsables sean castigadas hasta con 4 años de prisión y 400 días de multa.

Se trata de 11 mil llamadas falsas que fueron realizadas al 911 en ese lapso, lo cual complica la respuesta de las autoridades ante algún hecho delictivo o de emergencia real, ya que se constituyen como un distractor para los elementos que acuden en auxilio.

La iniciativa advierte que “al que por cualquier medio de comunicación y sin existir razón que lo justifique, envíe mensajes o realice llamadas de alerta o emergencia o su equivalente con el objeto de inducir al error y movilizar a los sistemas de emergencias y urgencias o sus equivalentes, se les impondrá de tres a seis meses de prisión y de dieciocho a treinta y seis días de multa”.

Advierte también que si con la llamada o mensaje se produce un daño, se altere el orden público o se distrae el estado de fuerza de la autoridad, se impondrán de uno a dos años de prisión y de setenta y dos a doscientos días de multa.

En caso de reincidencia, se impondrá de dos a cuatro años de prisión y de doscientos cincuenta a cuatrocientos días de multa.

Millán Bueno dijo que se debe generar conciencia al utilizar los servicios de emergencia para hacer bromas, pues esta práctica indebida puede poner en peligro la vida, la de familiares o de otras personas; al desviar patrullas, ambulancias, unidades de bomberos y otros porque se pueden provocar accidentes o que no se atienda a alguien que verdaderamente tenga una emergencia.