Bershka, Pull & Bear, Zara, Shasa, Stradivarius, entre otras marcas más, fueron catalogadas en la categoría de ropa ‘fast fashion’, es decir, prendas de vestir que dejan de ser funcionales por la mala calidad de su material.

De acuerdo con la más reciente publicación de la revista del Consumidor, la durabilidad de la ropa ha pasado de varios años, a tan sólo unos cuantos meses, esto debido a que la mayoría de las tiendas que venden estas prendas las confeccionan en países asiáticos con materiales de muy mala calidad o ‘desechables’.

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), explica que derivado al modelo de mercado, al tener tanta ropa basura que es muy difícil reutilizar o darle otro ciclo de uso, ésta llega a los basurero, derivando con ello un fenómeno equitativo a lo que pasa con las botellas, popotes o platos desechables, pues la historia de la huella medioambiental que dejan es la misma.

También el calzado es desechable

Siguiendo la misma logística de producción, las marcas de moda ‘fast fashion’ que incluyen calzado en su catálogo también utilizan materiales sintéticos y muy poca durabilidad, pero con costos bajos y con diseños que fácilmente caducan.

“Es muy importante notar que cuando sufren algún desperfecto, lo primero que se piensa es en tirarlos y comprar otros, puesto que en muchos casos sale más barato eso, que mandarlos reparar, convirtiéndolos en basura y refrendando su carácter de desechable”, asegura la publicación.

Marcas ‘fast fashion’ (de acuerdo con la Profeco):
Bershka, Bestseller, Boohoo.com, C&A, Charlotte Russe, Cotton On, Esprit, Fashion Nova, FIVE FOXes, Forever 21, Gap Inc., Giordano, Guess, H&M, Mango, Massimo Dutti, Metersbonwe, Missguided, Miss Selfridge, Nasty Gal, New Look, NewYorker, Next, Oysho, PrettyLittleThing, Primark, Pull & Bear, Rainbow Shops, Renner, Riachuelo, River Island, Romwe, S. Oliver, Shasa, She ln, Stradivarius, Topshop, United Colors of Benetton, Uniqlo, Uterqüe, Urban Outfitters, Victoria’s Sectret, Zaful, Zara.