La parte secreta del encuentro Harris-López: desvenezualización de México y mayor eficiencia contra Covid-19
En la preparación de una próxima reunión entre los mandatarios estadounidense y mexicano primero hay que limpiar la alfombra de asuntos comunes que para la Casa Blanca no son la piedra en el zapato sino el enorme muro que le estorba al acuerdo binacional.

Una cosa es lo que se conoció mediante la versión oficial de la visita a México de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, y otra los asuntos tratados en privado con el sello de “state secret” que son los que en realidad le interesan al presidente del país vecino, Joe Biden. La contención de la pandemia de coronavirus en la frontera norte para lo cual la Casa Blanca donó un millón de vacunas y el muro político con tal de evitar que el modelo político venezolano avance hacia el norte del continente, tuvieron que ser temas prioritarios de la agenda bilateral.
Más allá del anecdótico descuido del protocolo por parte del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, que llamó “presidente Kabala” a la visitante, está suficientemente probado que Estados Unidos le tiene colocado encima un enorme microscopio a AMLO y muestra de ello es que la prensa internacional, principalmente la de Washington, ha dedicado portadas a criticar el desempeño de quien encabeza la llamada Cuarta Transformación.
La histórica y casi siempre incómoda vecindad entre México y Estados Unidos va más allá de las frases agradables, informes satisfactorios y parafernalia diplomática que matiza el fondo de la relación. Aparte de ser un país de tránsito de migrantes hacia el sueño americano, lo que ocurra en el suelo azteca es de alto interés para Biden sobre todo ahora que su homólogo López da indicios repentinos del populismo y sus derivados.
Simplemente la solicitud para que Washington operara el retiro del financiamiento internacional a la organización Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, a lo cual Biden no accedió, así como la embestida de AMLO y su partido contra el Instituto Nacional Electoral, alertó sobre la tentación por eliminar a órganos autónomos como los únicos contrapesos que le queda a la 4T ante los sumisos poderes Legislativo y Judicial.
En la preparación de una próxima reunión entre los mandatarios estadounidense y mexicano primero hay que limpiar la alfombra de asuntos comunes que para la Casa Blanca no son la piedra en el zapato sino el enorme muro que le estorba al acuerdo binacional. Lo del financiamiento al desarrollo de las zonas mayormente expulsoras de migrantes en el sur de México y en Guatemala, El Salvador y Honduras e intercambio de trabajo de inteligencia para resolver trata de personas y desapariciones forzadas, así como ayuda en la atención del Covid-19, es la parte maquillada para adornar el encuentro en el cual, dicho sea de paso, López participó sin cubrebocas y Harris nunca se lo quitó.
Comentarios