La complicada Embajada de España para Quirino Ordaz: si los del PRI son sus amigos…
Tarde o temprano saldrán a relucir los intereses que tiran la piedra y esconden la mano.
FOTO: PRI.
Demasiado rápido transitó del impacto noticioso a crisis política y diplomática la eventual designación del gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz Coppel, como embajador de México en España, saliendo a relucir las “manos negras” que en partidos, gobierno federal y servicio diplomático intentan echar abajo la decisión tomada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
De esta manera se le complica al mandatario estatal el retiro que se creía terso y en cambio transita hacia líos inesperados.
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Tal vez se trate de una mala decisión de Ordaz Coppel porque en el ejercicio del poder público pesa mucho la sabia virtud de conocer el tiempo. En el estatus de ex gobernador que adquirirá a partir del primero de noviembre le hubiera caído bien el reposo circunstancial, aunque a mediano plazo aceptara formar parte del gabinete de López Obrador que emana de un partido político distinto al PRI que llevó al empresario mazatleco al actual cargo.
El atípico planteamiento del dirigente priista nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, que amenaza con expulsar del partido a Quirino Ordaz en caso de que no pida permiso al Consejo Político del PRI para desempeñar un cargo en el régimen autodenominado de la Cuarta Transformación, devela motivaciones más profundas ya que el Revolucionario Institucional está colaborando con AMLO en las iniciativas de reformas estructurales que el presidente envía al Congreso de la Unión.
¿Entonces por qué el ultimátum estridente al gobernador de Sinaloa siendo que el asunto pudo manejarse de manera interna?
También llama la atención que la Asociación del Servicio Exterior Mexicano, un organismo poco dado a ventilar públicamente sus agendas, se oponga a que Quirino Ordaz sea embajador en España, justificando el posicionamiento en que “hay al menos una decena de embajadores y once ministros adscritos a México, mujeres y hombres, todos los cuales cumplen los requisitos y cuentan con amplia trayectoria y la experiencia necesaria para encabezar consulados y embajadas”.
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Tarde o temprano saldrán a relucir los intereses que tiran la piedra y esconden la mano. La concatenación de demasiados y repentinos opositores permite identificar ambiciones que pretenden mantener el control de todo lo referente a la función pública y se refrendan indispuestas a ceder cotos de poder que le mermen fuerza a la partidocracia y la conversión de ésta en cleptocracia. En todo caso la duda consiste en si persistirá Quirino Ordaz en aceptar el cargo que le ofrece López Obrador aún en las condiciones de dificultad que se presentan.
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