Discriminación y rechazo familiar dañan la salud mental de la comunidad LGBT+
Las personas LGBT+ son más propensas a tener alguna adicción a sustancias dañinas

El rechazo de las familias, la discriminación que sufren en centros de trabajo, en espacios escolares y lugares públicos son los principales detonantes para que una persona de la comunidad LGBT+ sufra de depresión, ansiedad, y en los peores casos, decida quitarse la vida, explicó Tiago Ventura, activista de la comunidad LGBT+ y presidente de la asociación Sinaloa + Incluyente.
“Estas discriminaciones tienden a elevar mucho más los signos depresivos que finalmente en los peores casos pueden derivar en quitarse la vida, en atentar con la propia vida de las personas”, dijo.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y Género (ENDISEG) 2021, en México viven 5 millones de personas 15 años y más que se reconocen a sí mismas con orientación sexual y/o identidad de género (OSIG) no normativa o no convencional, es decir, población LGBT+.
LEER MÁS: ¿Qué exige la comunidad LGBT+?
De estas 5 millones de personas que se reconocen como población LGBT+, el 26.7% alguna vez pensó en suicidarse y el 14.2% intentó hacerlo. Por lo que, 1.4 millones de personas de 15 años y más de la comunidad LGBT+ tuvo la idea o intento de suicidio.

Tiago Ventura comentó que desde la asociación Sinaloa + Incluyente se busca canalizar con asistencia gratuita en caso de que alguna persona se acerque a ellos con signos de depresión.
En los casos que han atendido, detectaron que el rechazo familiar está muy relacionada con los problemas de salud mental que padecen las personas de la comunidad LGBT+.
La Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y Género señala que de las personas LGBT+ que han pensado o intentado el suicidio, la mayoría (57.2%) ha sido por problemas familiares o de pareja, el 20.3% por problemas en la escuela y el 19.1% debido a problemas de salud.

“Generalmente, llegan con signos muy visibles de discriminación o que están viviendo una etapa muy complicada en su vida en temas de reconocimiento de su identidad, en temas de aceptación en el núcleo familiar, pérdida del trabajo por orientación sexual, discriminación en los centros laborales o incluso cuando son diagnosticados con infecciones de transmisión sexual o VIH”, dijo Ventura.
Añadió que el rechazo y la discriminación hacia la comunidad LGBT+ también provoca un incremento en el consumo de sustancias dañinas para la salud.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la población LGBT+ presenta mayores tasas de consumo de sustancias psicoactivas que la población en general.
“Incluso, arrojarlas, orillarlas a consumir sustancias nocivas para la salud, medicamentos no controlados e incluso drogas”, dijo Ventura.
Estos problemas de adicciones y depresión suelen agravarse debido a la falta de cultura de atención médica que tiene la población LGBT+, ya que no suelen acudir a centros de salud y hospitales por miedo a ser rechazados y discriminados por el personal de salud, mencionó el activista.
Este hecho ha sido abordado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) quien señaló la disparidad que existe en la atención médica para la comunidad LGBT+ y las personas heterosexuales o con orientación sexual y/o identidad de género (OSIG) normativa.
La OMS observó en un informe del 2011 que existen pruebas científicas sobre el “estigma generalizado contra la homosexualidad y la ignorancia acerca de la identidad de género en la sociedad establecida y en los sistemas de salud”.
En su estudio, la OMS observó tasas mayores de depresión, ansiedad, consumo de tabaco, abuso del alcohol, consumo de sustancias psicoactivas, suicidio e ideas suicidas como resultado del estrés crónico, aislamiento social y la desconexión con respecto a los servicios de salud.
Un ejemplo de esta desconexión es que las mujeres lesbianas o bisexuales usan los servicios de salud preventivos con menos frecuencia que las mujeres heterosexuales, por lo que pueden correr mayor riesgo de sufrir obesidad o cáncer de mama.
Además, de acuerdo con este estudio, las personas trans tienen menos probabilidades de tener seguro médico en comparación con las personas heterosexuales o la población dentro del rango LGB (Lesbianas, Gays y Bisexuales).
LEER MÁS: Las escuelas son un ambiente hostil para alumnos y alumnas LGBTI: Unesco
Tiago Ventura señaló que, para acabar con el problema de depresión, suicidio y adicciones en la comunidad LGBT+ se deben tomar en cuenta diferentes variantes como:
- Crear concientización entre la sociedad para atacar la discriminación, hostigamiento y rechazo que sufren las personas LGBT+.
- Tener más fuentes de información y estadísticas sobre el tema de adicciones y salud mental en la población LGBT+ para crear programas de apoyo.
- Garantizar el trato digno del personal de salud hacia las personas LGBT+, para que éstas no tengan miedo de acudir a un centro médico.

Comentarios