La decisión que tomó ayer el Cabildo de Mazatlán al pronunciarse para que los diputados federales sinaloenses intervengan ante la Comisión Federal de Electricidad, gestionando que solucione los apagones y abusivos cobros que afectan a las familias del puerto, debería ser replicada en el resto de los municipios y convertirse en bandera social del gobernador Rubén Rocha Moya y los senadores Imelda Castro, Mario Zamora y Raúl Elenes.

Los usuarios del servicio que presta la CFE se hallan en la desesperación y se sienten solos frente a las fallas y las altas tarifas de la paraestatal que hace como que no ve ni oye a los inconformes, sometiéndolos a largas esperas, pérdidas económicas en hogares y comercios, además del mal estado en qué se encuentra la infraestructura de distribución del fluido eléctrico.

Al unísono los regidores y el al alcalde de Mazatlán, Edgar González Zataráin, acordaron exponer ante los representantes de Sinaloa en el Congreso de la Unión que tomen cartas en el asunto para que sus representados sean escuchados y reciban la atención de calidad de la paraestatal que se publicita como una empresa de clase mundial, falsa eficiencia que la convierte en farol de calle y oscuridad en casa.

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El presidente municipal dio a conocer que la CFE aparte de afectar a la ciudad al no funcionar semáforos y alumbrado público, le cobra al Ayuntamiento a cuatro pesos el kilowatt, lo cual consideró como injusticia “porque es un tema de seguridad, es un tema de beneficio a la población y se nos cobra como una tarifa comercial”.

Los legisladores federales no están al pendiente de lo que ocurre en Sinaloa o bien también fingen sordera, dejando a los ciudadanos a expensas de la crisis que enfrenta la CFE con repercusiones de distintos tipos en las familias, las empresas y los servicios públicos. El llamado que surge en Mazatlán no fuese necesario si los que se asumen como representantes populares se tomaran la molestia de voltear a ver qué necesitan aquellos que los llevaron a los escaños, mismos a los que ahora ignoran.