Culiacán, Sinaloa.- Esta nota podría comenzar así: Jesús Valdés siempre fue de izquierda, Gloria Himelda Félix Niebla era líder estudiantil en su juventud en la lucha por eliminar las cuotas universitarias, Martín Heredia repartía propaganda con ideas de Engels, Marx y Mao junto con pizzas en Mazatlán.

Pero no.

Tampoco se puede decir que Ricardo Madrid comenzó desde abajo y con ideas Trosky luchaba por mejorar el transporte urbano, o que Cinthia Valenzuela encabezó la huelga de trabajadoras jornaleras.

O que Concepción Zazueta, Faustino Hernández Álvarez, Marcos Osuna o Adolfo Beltrán eran miembros de clubes de lectura de crónicas de los hermanos Flores Magón.

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Pero lo que si se puede describir de ellos -y siendo lo más justos posibles- es que son quienes encabezarán y defenderán los comités de la Cuarta Transformación de Morena en Sinaloa.

Fueron los invitados especiales de Morena para Claudia Sheinbaum Pardo, la lideresa y defensora del proyecto de la Cuarta Transformación, tras haber sido designada por el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Los mandaron a la zona VIP y a sentarse en el escenario a ver a todas esas personas que encabezan los comités vecinales y reparten el periódico Regeneración.

A ver a la gente que gritaba “Fuera el PRI”.


“Se decidió invitar a personas de otros partidos”, dijo Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, mientras la misma gente que pedía fuera al PRI le reclamamba.

“(…) Hemos invitado a ex candidatos y políticos del PRI porque tienen la misma idea que ustedes”, prosiguió y la gente le chiflaba.

Y para legitimar el proyecto, presentó a los escritores Elmer Mendoza y Arturo Santamaría, al ex boxeador Julio César Chávez y al ex atleta Paralímpico Jorge Benjamín González como personas interesadas a unirse al proyecto de Claudia Sheinbaum.

“Ricardo Madrid… presidente de la mesa directiva del Congreso… renunció al PRI”, dijo Rocha Moya y la gente abucheaba.

“Jesús Antonio Valdés Palazuelos… renunció al PRI”, y los gritos aturdían en el Figlosente.

La última vez que este lugar estuvo tan lleno de priistas fue porque era mítin de José Antonio Meade para cierre de campaña presidencial del PRI. Ahora lo estuvo por el inicio de precampaña de Claudia Sheinbaum Pardo, de Morena.

Y Gerardo Fernández Noroña agregaba: necesitamos unidad, unidad del pueblo, unidad de los partidos Morena, PT y Verde.

“El PRI está muerto, no tiene nada. Alejandro Moreno se encargó de desaparecerlo. No estoy defendiendo nada, pero no todas las personas de nuestro movimiento estaban en el PRI o estaban en el PAN, pero nuestro movimiento es para acabar con el miedo, el hambre y la desesperanza y hay personas que han tomado esa decisión”, señaló el líder del PT y vocero de Claudia Sheinbaum Pardo.

Y como ejemplo recordó a Manuel Bartlet, ex priista y ahora miembro de gabinete de López Obrador.

“Claro que nos reservamos el derecho de admisión, pero toda persona que quiera comprometerse con la Cuarta Transformación, bienvenidos, siempre y cuando haciéndose cargo de su trayectoria”.

Y los morenistas que acudieron al evento se relajaron. Callaron. Aplaudieron a Fernández Noroña.

“No podemos creer que ya ganamos y la derecha está muy enojada y están en los medios de comunicación duro y dale para convencer, por eso tenemos que trabajar en los comités para llevar al pueblo”, sumó Mario Delgado, dirigente nacional de Morena.

Y este daba como recordatorio que el presidente López Obrador instauró Morena como partido de pueblo, el mismo que ordena y manda en sus estatutos.

Y remató con otro recordatorio: la gente que viene y se suma es para trabajar en el movimiento.

“En Morena el pueblo manda y todas las candidaturas se van a resolver con las encuestas, que sea el pueblo quién nos debe representar. A todos les digo: aquí se viene a trabajar, se los digo a militantes y a los externos”, mencionó Delgado.

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Y para terminar el evento político, Sheimbaum Pardo agarró el micrófono para contar historias de su juventud, tomar protesta a las y los nuevos defensores de la Cuarta Transformación y decirle a los militantes: vamos a serenarnos