Ciudad de México.- Joaquín Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, se entregó este jueves 25 de julio a las autoridades de Estados Unidos, junto con Ismael “El Mayo” Zambada, ambos figuras clave del Cártel de Sinaloa.

La noticia marca un hito significativo en la lucha contra el narcotráfico, según las autoridades estadounidenses que esta misma tarde confirmaron que la detención ocurrió en un aeropuerto de El Paso Texas.

¿Quién es Joaquín Guzmán López?

 

Conocido también como “El Güero”, Joaquín Guzmán López es hijo de Griselda Guadalupe López, la segunda esposa de “El Chapo”. A diferencia de su hermano Ovidio, que fuera detenido el 5 de enero de 2023 en Culiacán y luego extraditado a Estados Unidos, Joaquín ha mantenido un perfil más discreto dentro de la organización criminal.

A lo largo de los años, Guzmán López se ha involucrado en los negocios ilícitos heredados de su padre. En 2015, participó en la operación que permitió la fuga de “El Chapo” del Penal del Altiplano. Además, ha sido sancionado junto a otros miembros del Cártel de Sinaloa por su participación en el tráfico de fentanilo y otras drogas letales hacia Estados Unidos.

El Departamento del Tesoro de EE. UU. ha congelado los activos y cuentas bancarias de Guzmán López y ha prohibido a los ciudadanos estadounidenses realizar negocios con él. Estas medidas son parte de una serie de sanciones dirigidas a desmantelar la red delictiva del Cártel de Sinaloa, supervisada en gran parte por “Los Chapitos”.

Operaciones y enfrentamientos con la Ley

 

Según autoridades, Joaquín Guzmán López supervisaba aproximadamente once laboratorios de metanfetamina en Sinaloa, produciendo entre 1,400 y 2,700 kilos de drogas mensualmente. Y afirman que su involucramiento en el narcotráfico se intensificó tras el asesinato de su hermano Édgar Guzmán en 2008.

El Departamento del Tesoro ha señalado que Guzmán López está involucrado en la gestión de “súper laboratorios” abastecidos por una red dirigida por los hermanos Ludim y Luis Alfonso Zamudio Lerma, quienes operan en Sinaloa y se dedican al tráfico de drogas ilícitas hacia Estados Unidos.

Entrega y consecuencias

 

Tras la entrega de Guzmán López y “El Mayo” Zambada, diversos analistas del tema narcotráfico afirman que esto representa un golpe significativo al Cártel de Sinaloa. Pero van más allá al advertir que esta acción no solo afecta la operatividad del cartel, sino que también envía un mensaje fuerte sobre la cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico.

Guzmán López fue acusado por primera vez en 2018 en una corte federal de Washington DC, y en abril de este año, se le imputaron nuevos cargos en el Distrito Norte de Illinois.

Expertos en temas de seguridad y narcotráfico advierten la posibilidad de que la entrega de Joaquín Guzmán López y “El Mayo” Zambada pueda desencadenar una serie de eventos dentro del Cártel de Sinaloa, afectando su estructura y operaciones. Sin embargo, también destaca la resiliencia del cártel y la continua amenaza que representa para la seguridad regional e internacional.

Joaquín Guzmán López es considerado un elemento clave en el grupo Los Chapitos, liderado por su hermano Iván Archivaldo Guzmán Salazar, y del que también forma parte su hermano Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Ovidio Guzmán López, este último preso en Estados Unidos.

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