Culiacán, Sin.- Luego de que se hiciera público que dos curules en el Congreso del Estado quedaron en manos de personas con vínculos familiares directos con quienes dejaron el cargo, la diputada María Teresa Guerra Ochoa, presidenta de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), reconoció que se enteró del parentesco ya que habían tomado protesta y pidió mayor vigilancia de Morena en los procesos internos de selección de candidatos.
Uno de los casos es el de Elizabeth Ramírez Tirado, quien sustituyó a su esposo, el diputado Juan Carlos Patrón Rosales, quien solicitó licencia para integrarse a labores internas del partido Morena en la Ciudad de México. Otro es el de Hólincer Castro Marañón, quien suplirá al diputado Genaro García Castro, luego de que fue desaforado para enfrentar cargos penales por presuntos actos de corrupción cometidos en 2021, cuando fue secretario del Ayuntamiento de Ahome.
Ambos diputados suplentes percibirán un salario superior a los 100 mil pesos mensuales, como se indica en el tabulador de salarios del Congreso del Estado.
Guerra Ochoa dijo que en lo personal rechaza los excesos y defiende una postura de congruencia y austeridad.
“Yo puedo opinar en lo personal, que he tratado en eso de ser sumamente congruente. No solamente en eso, sino en muchas más cosas. A pesar de todo el ambiente que vivimos, ni guaruras ni excesos. No es mi convicción”, expresó.
Sobre los casos concretos, explicó que se enteró de los lazos familiares una vez que ya habían sido registrados como diputados suplentes.
“Yo me enteré de la familiaridad hasta que ya estaban aquí. Son decisiones individuales que tomaron ellos como candidatos, que la verdad, desde el punto de vista de la sociedad… incluso la propia presidenta en la carta que manda al partido de Morena hace un llamado a ser congruentes. Yo me sumo a esa convocatoria”, dijo.
“Eso va a obligar, ahí sí, a que el partido de Morena y los estados sean mucho más vigilantes, porque no debieron de haber pasado los registros. Lamentablemente sucedieron esos hechos. Espero que no se repitan con la convocatoria que está haciendo la presidenta”, agregó Guerra Ochoa.
La diputada reconoció que este tipo de decisiones afectan la imagen del partido, al replicar prácticas del pasado que Morena ha criticado.
“Son de los excesos que se cuestionaron en el pasado y nos hace ver mal como partido político si se replica, no solo en el Congreso, sino en cualquier área”, mencionó la diputada.
“Tendrían que haberse vigilado y regulado a la hora de registrarse para impedir eso. Yo, sin embargo, respeto, son diputados, pero creo que la decisión estuvo en los titulares, cuando deciden dejar la silla en alguien cercano, y no es bien visto socialmente”, añadió.
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