Ciudad de México.- El 17 de junio entró en vigor la Ley Silla, la cual obliga a patrones a proveer de manera accesible asientos o sillas con respaldo para que los trabajadores puedan sentarse periódicamente a lo largo de su jornada laboral para evitar daños a la salud. No obstante, empleados aseguran que aún no les proporcionan este derecho laboral, se ha dado con condiciones o se ha aplicado a medias.
De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en México las personas laboran en promedio 43.7 horas semanales. En sectores como el industrial, obrero, hotelero, restaurantero, de seguridad privada o en tiendas departamentales estas horas suelen transcurrir de pie, lo que puede ocasionar problemas graves de salud física, como fatiga muscular, dolores crónicos en piernas y espalda, así como várices o trastornos circulatorios.
El médico David Sánchez Monroy, entrevistado por académicos de la Facultad de Derecho de la UNAM, expuso que el cuerpo no debe estar en una misma postura, ya sea sentado o parado, más de dos horas. Se le debe dar unos 10 minutos de descanso para moverse, estirarse o sentarse en una silla con respaldo y, propuso, de manera coordinada entre trabajadores.
“Estar de pie provoca problemas de falta de circulación, se te pueden generar várices, dolor de espalda baja, lo mismo que estar sentado, problemas de fatiga crónica, retención de líquidos, inflamación de piernas, lo cual varía entre cada individuo”, dijo el médico.
En diciembre, luego de aprobarse por la Cámara de Diputados y de Senadores, el Diario Oficial de la Federación (DOF) publicó esta reforma a la Ley Federal del Trabajo. Se dio un periodo de 180 días a los empleadores para adquirir las sillas, el cual se cumplió hoy.
El artículo 132 de la Ley Federal del Trabajo establece la obligación de los patrones a proveer el número suficiente de asientos o sillas con respaldo a disposición de todas las personas trabajadoras en los sectores de servicios, comercio y centros de trabajo análogos, para la ejecución de sus funciones o para el descanso periódico durante la jornada laboral.
“Me acaban de informar en recursos humanos que sí las pidieron en Mercado Libre (las sillas), pero aún no han llegado”, comentó un usuario de X a la cuenta “Yo por las 40 horas”.
Asimismo, en una tienda Pandora solo otorgaron una silla cuando son tres empleados y les prohibieron usar su celular durante esos diez minutos de descanso cada dos horas.
La Ley Silla, en su artículo 133, también prohíbe que las personas empleadoras obliguen a las personas trabajadoras a permanecer de pie durante la totalidad de la jornada laboral.
Un usuario de X compartió con “Yo por las 40 horas”, que pidió denuncias sobre el incumplimiento de esta reforma en materia laboral:
“Aquí en Palacio de Hierro Interlomas, departamento de electrónica, solo les pusieron una silla a los vendedores en las terminales”.
Resistencia de empresarios
La Diputada Patricia Mercado, una de las principales promotoras de esta Ley Silla desde hace años, compartió que un empleador decidió pasar de pie las 8 horas de jornada en la fábrica y le dio dos días de fiebre, lo cual es sólo un ejemplo de los efectos a la salud. El IMSS, documentó en el pleno, recibe 30 mil personas al año con fascitis en la planta del pie.
El año pasado, cuando la iniciativa avanzó en la Cámara de Diputados y Diputadas, la legisladora Patricia Mercado confió en que el sector empresarial mostrará voluntad de ponerla en práctica porque desde 2023 ella y personas que defienden derechos laborales impulsaron diálogos con varias cámaras de comercio, servicios e industria para acordar el avance de la ley.
Y aunque empleadores ya tienen la obligación de cumplir con la Ley Silla, todavía en los últimos meses representantes del sector empresarial mostraron su disgusto no sólo con esta reforma, si no con la que está pendiente para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas.
Sobre esta última, el Secretario del Trabajo y Previsión Social, Marath Baruch Bolaños, informó el 1 de mayo que buscarán que la reducción sea una realidad para 2030, algo que a lo que Frente Nacional Por Las 40 Horas, que integra a trabajadores de distintas entidades, se ha opuesto porque urgen que se aplique cuanto antes.
En el contexto de estos cambios laborales, durante la Gira Nacional por las 40 horas que se realizó en el Congreso de Nayarit destacó la postura de Crucita Robles, integrante del Consejo Coordinador Empresarial de Nayarit, quien consideró que al sector empresarial le afecta no sólo la Ley Silla, también la Norma Oficial Mexicana 035 (NOM 035), que establece elementos para identificar y prevenir los factores de riesgo psicosocial, como el estrés, en los centros de trabajo, así como la posibilidad de reducir a 40 horas la jornada laboral, lo que Robles calificó como un ”cambio radical”.
“Nosotros como empresarios tenemos encima la nueva Ley Silla, por ejemplo, donde también nos afecta. Tenemos esa parte donde tenemos la Norma 035, que todavía no la terminamos de aplicar y que nos afecta como empresarios, claro, no a todos los giros”, dijo.
Mientras que en enero, en un conversatorio organizado por la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur), la tesorera general Rosa Elena García Hidalgo consideró que, pese a estar o no de acuerdo con la Ley Silla, desde el sector empresarial pedirán posteriormente evidencia al Gobierno federal sobre si hubo o no un impacto a la salud de las y los trabajadores con la entrada en vigor de la reforma.
“Por parte de la confederación creo que nuestra obligación será el día de mañana dejar que se implemente y sí solicitarle las estadísticas pertinentes tanto al IMSS como a la Secretaria del Trabajo para ver qué impacto, más allá del gasto que le están haciendo a la comunidad empresarial realizar en este momento, cuál es el impacto benéfico que tendrá a los trabajadores”, aseveró.
Cómo denunciar
Los trabajadores que no puedan acceder a una silla a partir de hoy, pueden denunciarlo de manera anónima ante la Procuraduría Federal de Defensa del Trabajo para que la Secretaría del Trabajo realice inspecciones.
Vía telefónica: en el área metropolitana al 59 98 20 22, del interior de la República al 01 800 71 72 942 y 01 800 91 17 877.
De forma personal: en el módulo de quejas y sugerencias ubicado en el segundo piso de las oficinas centrales de la PROFEDET, ubicado en Avenida Dr. José María Vertíz número 211, Colonia Doctores, Delegación Cuauhtémoc, Ciudad de México, C.P 06720.
Si se comprueba que una empresa no permite el uso de sillas, puede derivar en sanciones económicas para los empleadores por el equivalente de 250 a 2.500 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) (270 mil pesos). En casos de reincidencia, se puede suspender el centro de trabajo.
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