Culiacán, Sin.- Joaquín Landeros Güicho, secretario de Administración y Finanzas del Gobierno de Sinaloa, presentó ante el Congreso del Estado la iniciativa de Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos 2026, con el anuncio de solicitud de un nuevo megapréstamo por 2,200 millones de pesos.
La propuesta, recibida por la Comisión de Hacienda Pública y Administración que es presidida por el legislador Ambrocio Chávez Chávez, llegó junto con el anuncio de que habrá un incremento mayor al 20 por ciento para seguridad pública.
Pero no es todo, también hubo un segundo tema dominante, el de deudas heredadas de las administraciones de Mario López Valdez y Quirino Ordaz Coppel.
Esas deudas, señaló Landeros Güicho, deben ser pagadas con un nuevo megacrédito, esta vez por hasta 2 mil 200 millones de pesos, para financiar infraestructura y obra pública durante el 2026, una estrategia que ya se utilizó durante 2025, pero para poder cubrir el pago de deudas ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) por un monto de 2,300 millones de pesos.
En ambos casos, y porque así se establece en la Constitución Política del Estado de Sinaloa, no se puede pedir dinero prestado para pagar deudas, por lo que lo asignado en los presupuestos sobre distintos rubros serán redistribuidos en el pago de pasivos que no tienen fuente de pago.
¿Qué deudas tiene el gobierno de Sinaloa?
De acuerdo con una reunión previa de trabajo entre el secretario y la Cámara, el gobierno de Rubén Rocha Moya ha dedicado recursos para pagar deudas que dejaron los gobiernos de Mario López Valdez, Quirino Ordaz Coppel y la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Son deudas que ascienden a 17,141 millones de pesos, por los cuales ningún funcionario o funcionaria ha tenido sanción.
Se trata de omisiones de pago entre 2011–2016, en el gobierno de López Valdez cuando se retuvieron 2,676 millones de pesos en aportaciones al Instituto de Pensiones de Sinaloa, el ISSSTESIN y el sistema de ahorros SIAP de trabajadores de la Educación, pero no se reportaron a las cuentas de los burócratas.
También se suma una deuda con el Fondo de Vivienda ISSSTESIN para trabajadores del Estado durante la administración de López Valdez, por 800 millones de pesos.
En las deudas y pasivos se incluyen laudos y sentencias perdidas durante entre 2011 y 2021, abarcando los periodos de gobierno de López Valdez y Quirino Ordaz Coppel, por un monto en conjunto de 1,645.9 millones de pesos.
A esos pasivos se suma un rescate financiero a la Universidad Autónoma de Sinaloa ante el Servicio de Administración Tributaria por retenciones y timbrados no reportados entre 2015 y 2019 por un monto de 2,992 millones de pesos, incluyendo multas por falta de pago.
Joaquín Landeros Güicho dijo que la deuda total tomada por el Gobierno actual fue por 17,141 millones de pesos, pero nada de eso tenía fuente de pago e, incluso, no fueron entregadas en el proceso de entrega-recepción.
De acuerdo con la Secretaría de Administración y Finanzas, de esos pasivos ya se han pagado 14,272.3 millones de pesos, por ello que se solicite ahora un nuevo mega préstamo de 2,200 millones de pesos.
Esta nueva megadeuda que se busca será para pagar deudas del pasado, pero no incluye un proceso de sanción contra funcionarios y funcionarias responsables.
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