Moscú. El líder opositor ruso Alexei Navalny, quien era considerado uno de los principales detractores del Kremlin, falleció el pasado viernes en la prisión del Ártico, donde cumplía una condena de 19 años, según confirmaron las autoridades penitenciarias.

“El 16 de febrero de 2024, el recluso Alexei Navalny se sintió mal después de un paseo y perdió el conocimiento”, declaró el servicio penitenciario de la región ártica de Yamal en un comunicado.

“A pesar de los esfuerzos de reanimación, no se logró salvarlo. Los médicos de emergencia confirmaron su fallecimiento. Las circunstancias exactas de su muerte están siendo investigadas”, añadió el comunicado el pasado viernes.

Navalny, de 47 años, había sido condenado por cargos de “extremismo” y estaba cumpliendo una sentencia de 19 años en una colonia penal remota en el Ártico, en condiciones muy difíciles. Sus procesos judiciales habían sido denunciados como políticamente motivados y como una forma de castigo por su activismo y oposición al presidente Vladimir Putin.

Al respecto, el equipo de Navalny acusó que su aliado fue asesinado y señaló que las autoridades rusas tratan de retener el cuerpo para “cubrir pruebas”.

“Es evidente que los asesinos quieren cubrir sus huellas y por eso no entregan el cuerpo de Alexéi, ocultándoselo incluso a su madre”, publicó Ivan Zhdanov en Telegram.

Los investigadores rusos han dicho que el cuerpo de Navalny no será entregado a su familia hasta que se complete la investigación, según Kira Yarmysh, portavoz del activista. Mientras tanto, el abogado de Navalny informó que supuestamente estaba retenido en la morgue, pero señaló que un contacto de él negó que estuviera ahí.

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