Por: Cristinas Ibarra

El pasado 10 de julio tuve la oportunidad de participar en el Foro para la Transferencia de Conocimiento para una Agricultura Agroecológica organizado por la Secretaría de Agricultura y Ganadería de Sinaloa, en el que se reunieron diversos actores involucrados en la agricultura para generar ideas y sobre todo ACCIONES, que transformen al campo sinaloense y lo saquen de la crisis en la que se encuentra.

Y es que esta crisis no es reciente, Sinaloa viene perdiendo participación en la producción nacional agropecuaria, no obstante, sus elevados rendimientos por hectárea en maíz blanco. La crisis hídrica hizo notar aún más los problemas que ya se arrastran y ante las crisis se deben cambiar a morir.

 

En el foro, tuve la oportunidad de participar como ponente mostrando los datos duros del sector, cosa que pocos conocen, pues muchos productores viven pensando en el campo sinaloense como el mejor por su calidad y productividad, pero debido a la sobreoferta, la falta de más integración de cadenas de valor, en realidad esa productividad se ha traducido en bajos precios y sobreoferta de algunos cultivos, lo que ha generado muchos problemas para la comercialización, decrecimiento de la actividad y crisis.

Entre los datos más significativos, es la reducción de la actividad primaria en el estado de 35% en el último trimestre de 2023, con respecto al mismo trimestre de 2022, así como el ser una entidad que ya desde 2022 mostraba un crecimiento negativo en el sector a diferencia de los demás punteros a nivel nacional, que mostraron crecimiento positivo, tal como se ve en la siguiente gráfica.

Además, expuse sobre la problemática causada por la ineficiente administración de la infraestructura de riego, lo que tampoco muchos productores quieren escuchar. Sin embargo, hubo gran apertura, quienes participaron están conscientes de que el cambio debe impulsarse desde los privados y buscar el apoyo en la ciencia, la tecnología, el gobierno, y otras entidades para lograr que Sinaloa deje de perder al cosechar, que las cosechas queden almacenadas y que sea el gobierno quien tenga que rescatar.

Comercialización, crisis hídrica, suelos, sustentabilidad y plagas, así como reforestación de las cuencas son los temas que además se abordaron en este foro. En cada uno de los temas los asistentes se plantearon continuar con acciones específicas, de manera que, aunque la tarea se ve larga y compleja, si no se inicia, jamás se logrará algo.

 

En suma, creo que este tipo de acciones son las que se deben priorizar y aunque el esfuerzo tiene sus limitaciones, me parece muy acertado al menos generar conversaciones incómodas para que las tierras fértiles, el clima, la mano de obra y la infraestructura que se emplea en el proceso de cultivos, genere rendimientos y ganancias, impuestos, poder de demanda y no toma de carreteras, productores quebrados y crisis económica como la que hoy viven muchos productores.

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*Esta es una colaboración de Cristina Isabel Ibarra, presidenta del Colegio de Economistas del Estado de Sinaloa, para Espejo Negocios.