La corrección que envió el gobernador Rubén Rocha Moya al Congreso del Estado para que modifique los recursos asignados a la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), aumentándolos de 80 a 150 millones de pesos, abre la posibilidad de que también efectúe reasignaciones en otras áreas castigadas en de la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos del Gobierno del Estado para el ejercicio fiscal 2025.

Como es sabido, Rocha Moya hizo recortes importantes en el gasto de área como son los casos de salud, seguridad, género y obras públicas, entre otros, lo que da lugar al análisis que tendrá que hacer la 65 Legislatura local si es que tiene la voluntad de enmendar para que áreas prioritarias del desarrollo y la estabilidad no queden vulneradas en sus funciones por la reducción de los recursos públicos a ejercer.

Por ejemplo, en la circunstancia presente de crisis de la seguridad pública se requerirá mayor presupuesto en equipamiento, capacitación, salarios y nuevos elementos que le hagan frente a la alta comisión de homicidios, delitos patrimoniales y desapariciones de personas, y apoyos extraordinarios a sectores económicos de mayor vulnerabilidad por la violencia de alto impacto que ejercen grupos criminales confrontados en el Cártel de Sinaloa.

Otro aspecto a atender es el correspondiente a la estrategia de construcción de paz de corto y largo plazo, invirtiéndole a la educación, cultura, ciencia, deporte y atención a franjas de pobreza extrema, si es que en verdad hay voluntad para construir una historia diferente en la cual Sinaloa no sea rehén de la delincuencia organizada ni los ciudadanos pacíficos y sus actividades se paralicen por el miedo.

Sinaloa vine momentos delicados que requieren de decisiones pensadas en las soluciones urgentes a todo lo que deriva de la inseguridad prolongada durante tres meses de estado de derecho, tranquilidad y gobernabilidad en riesgo. Hoy no vale revisar y aprobar el presupuesto estatal atendiendo lo que propone el gobierno o repartiendo las partidas con criterios políticos; ahora resulta crucial resolverles a los ciudadanos el complejo panorama de incertidumbre y desamparo que perciben.