Culiacán, Sinaloa.- Más de 10 minutos y en algunos casos casi media hora tardaron los ciudadanos en votar por los candidatos a un cargo en el poder judicial.

En una medición del tiempo promedio en el que los ciudadanos emitían sus votos realizada por Espejo en la casilla especial del Parque Constitución, se pudo observar que un gran número de los asistentes a las urnas duraron más de 10 minutos en votar. Hubo algunos casos en los que el tiempo en la urna se extendió por más de 20 minutos.

Al salir de la urna, Jorge Ortíz reconoció lo complicado del proceso de elección e indicó que solo se sabía de memoria el nombre de una candidata a ministra de la Suprema Corte. Para el resto de los cargos llevaba la relación numérica.

Por su parte, la señora Odalina, quien acudió a votar con su madre e hija, señaló que ellas sí investigaron a los candidatos y se prepararon para la elección. Aunque es algo nuevo, hay que participar, dijo reconociendo el proceso como parte de la historia política del país.

A este respecto, al acudir a votar, la diputada federal por Morena, Merary Villegas, indicó que los tiempos de la elección sí dieron la oportunidad a la ciudadanía de analizar cada uno de los perfiles.

“Si bien son bastantes, pero sí hubo el tiempo suficiente de que el ciudadano se informara”, dijo. “No es delito que el ciudadano traiga los números de los perfiles, porque son bastantes boletas y son bastantes candidatos, siempre y cuando se haya derivado de una investigación o una reflexión profunda que el ciudadano haya hecho”, añadió.

FOTO: César Ernesto Hernández

En está, la primera elección en la historia del país en la que la ciudadanía eligió a jueces y ministros del Poder Judicial, se eligieron 881 cargos federales entre ministros de la Suprema Corte de Justicia, magistrados del tribunal electoral y del tribunal de disciplina judicial; así como magistraturas y jueces de distrito.

Para votar, cada ciudadano recibió seis boletas que, en primer término se dividieron en dos: con recuadros blancos, para elegir cargos federales, y de recuadros de colores para los candidatos de distritos. En este último caso los nombres de los candidatos se asociaron a un color en tono pastel correspondiente a las materias penal, civil, de trabajo, mixto, etc.

Pero a su vez, las boletas para cargos federales se dividieron en dos partes, un lado para las candidatas mujeres, y el otro para candidatos hombres, cada uno con un número al lado del nombre, que es el número con el que se vota.

En este caso, cada una de las boletas indica por cuántos candidatos hombres y mujeres se tiene que votar.

Ante lo complicado de esta votación, el Instituto Nacional Electoral (INE) permitió a la ciudadanía llevar ‘acordeones’ e incluso celulares a las urnas con el fin de tener mayor claridad sobre los candidatos a la hora de emitir su voto.

Sin embargo, está situación derivó en denuncias de empleados de instituciones públicas respecto a que sus jefes les estaban entregando el listado de las personas por las cuales tenían que votar.

A pesar de las denuncias, a las urnas acudieron personas tanto con celulares como con hojas sueltas que justificaron está acción en la numerosa cantidad de cargos a elegir.

FOTO: César Ernesto Hernández

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