Culiacán, Sinaloa.-  A Alondra la desaparecieron antes de Navidad. Alguien llamó a su puerta, salió a ver quién era y desde ese momento no ha vuelto a entrar. Dejó a tres hijos y una madre desesperada, exigiendo respuestas por la localización de su hija.

“Ella nomás se dedicaba a sus tres hijos, tiene una niña de 12 años, uno de 11 y una de 4 años. Nosotros no tuvimos Navidad, mis nietos se despertaron con esa noticia y pues la verdad yo tengo mucho miedo”, indicó a ESPEJO la mamá de Alondra.

José Isaías desapareció el 31 de marzo del 2025 a los 22 años de edad. De acuerdo a su ficha de búsqueda, el joven fue visto por última vez en la Colonia Guadalupe, en Culiacán, vistiendo una playera tipo polo color negra y un pantalón deslavado.

El pasado 26 de mayo, su familia encabezó una marcha junto a otras siete familias de jóvenes desaparecidos, exigiendo a las autoridades respuestas sobre su paradero.

“No es justo que unos padres y una familia estemos sufriendo por las causas de otra gente”, declaró la tía de José Isaías.

Ambos han sido desaparecidos en medio de una confrontación interna del cártel de Sinaloa, una “narcoguerra” que ha dejado a su paso miles de personas asesinadas y desaparecidas, familias rotas y negocios cerrados.

De acuerdo a las fichas de búsqueda compartidas por la Comisión de Búsqueda de Personas en el Estado, la Fiscalía General del Estado, colectivos de búsqueda como Por las Voces Sin Justicia y Sabuesos Guerreras, Sinaloa ya suma 1,531 desapariciones de personas desde el 9 de septiembre del 2024 al 5 de junio del 2025.

En promedio, entre 5 y 6 personas son desaparecidas cada día.

No todos los casos han tenido la “narcoguerra” como motivo principal, también hay más violencias que ya se tenían desde antes, como violencia familiar, violencia de género y más.

Además, los datos no son absolutos, pues debe tomarse en cuenta que hay un número desconocido de casos que no se han denunciado y otros más que fueron denunciados, pero que sus familiares solicitaron que no se imprimiera ficha de búsqueda.

La mayoría de las desapariciones reportadas aquí, han ocurrido en los municipios del centro y sur del Estado: Culiacán, Mazatlán, Navolato y Elota. Tan solo en la capital se registraron 746 desapariciones, gran parte en la zona urbana y colonias como 21 de marzo, Alturas del Sur, Renato Vega, Lombardo Toledano, Miguel Hidalgo, Infonavit Humaya, El Barrio e Industrial El Palmito, entre otras. También hay registros de desapariciones en sindicaturas de la periferia como Costa Rica y Quilá.

 

En este análisis realizado por ESPEJO, se detectó que la mayoría de las desapariciones tienen como víctimas a hombres jóvenes de entre 20 a 30 años de edad.

LOS QUE HACEN FALTA, LA VIOLENCIA ES MUCHO MÁS QUE NÚMEROS

De las 1,531 personas desaparecidas que se han presentado desde septiembre del 2024 a la fecha, aún hay  994 personas que no han regresado a sus hogares. Sus rostros continúan circulando en redes sociales y tapizando las calles a través de fichas de búsqueda.

Inés Alberto de Jesús Ibarra Berrelleza, de 21 años de edad, salió de su casa el 16 de enero del 2025 para entregar un trabajo escolar en  la escuela de criminalística de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), en Culiacán. No ha regresado a casa.

Alondra Patricia Lozada León, de 27 años de edad y madre de tres hijos, desapareció la madrugada del 24 de diciembre, en Culiacán. La versión de sus familiares indican que posterior a una persecución vial de la que fue víctima, sujetos tocaron la puerta de su casa, ella salió a ver quién era y desde entonces no ha vuelto a entrar.

Paúl Leonel Jacobo Benitez, de 22 años de edad, desapareció el 30 de marzo del 2025 en Culiacán. Salió a atender una llamada de celular y desde entonces su familia desconoce su paradero.

Ricardo Lechuga Verdugo y Ramses Bastidas Areola, de 22 y 16 años de edad, respectivamente, desaparecieron el 28 de abril de 2025. Fueron vistos por última vez en la plazuela de Aguaruto . Según la versión de sus familiares fueron subidos a una patrulla de la Policía Municipal y desde entonces desconocen su paradero.

Los primos Óscar Darian Cervantes Sáinz y Edwin Alfredo Cervantes Vizcarra, ambos de 16 años de edad, fueron vistos por última vez juntos el 18 de enero, después de salir del domicilio ubicado en la colonia 21 de marzo, en Culiacán.

Aimar Guadalupe Antillo Valdez, de 17 años de edad. Su mamá la vio por última vez el lunes 21 de abril en la sindicatura de Tepuche, en Culiacán, y desde entonces, no ha parado de buscarla.

Su ausencia y la de más de mil 500 personas que han desaparecido desde el 9 de septiembre a la fecha, mantienen a las familias entre la falta de respuestas, la incertidumbre y el temor por el bienestar de sus seres queridos. Se trata de madres, padres, hijas, hijos, amigas, amigos cuyo proyecto de vida se ha visto interrumpido debido a la violencia azota al Estado de Sinaloa.

“¿Cómo es posible que encuentren carros, que encuentren laboratorios y no encuentren a las personas desaparecidas? Son muchísimas personas. Mi hija ya tiene más de 5 meses”, expresó la mamá de Alondra, joven desaparecida el 24 de diciembre.