Una fábula siempre va bien cuando el mundo continúa de cabeza. Por ello los relatos fantásticos son oportunos en cualquier época y a cualquier edad. ¿Cómo entender la vanidad, el egoísmo, la pereza, la ingratitud o cualquier virtud y debilidad humana sin la enseñanza de una fábula? E aquí una muy caballeresca, escrita por Italo Calvino en el año de 1952, que encierra la maldad y la bondad que existe en cada ser. No todo negro ni todo blanco, no todo luz ni toda oscuridad, no toda necedad  ni toda sensatez, no toda maldad ni toda bondad; así lo descubrió El vizconde demediado, un hombre con títulos honoríficos que tuvo que ver su cuerpo partido en dos para entender lo que había en su ser completo.

Entes de quedar frente a la tropa enemiga, el vizconde hace su marcha sobre los campos de guerra, al lado de su escudero. Con él reflexiona sobre lo decadente del terreno, donde las cigüeñas y los flamencos habían sustituido a los buitres y los cuervos; éstas ahora comen carne humana. Todos los muertos que habían dejado anteriores guerras parecían como sembrados en la tierra y brotaban desmembrados entre marañas de despojos, mezclados entre las plumas de buitres sin distinguirse bien a bien cuáles eran unos y cuáles otros. El mundo del vizconde era aún entero para su propia persona, y casi como anticipando su suerte, esa noche, pensativo y ensimismado, se cruza de brazos y se abraza a sí mismo, lejano a todo lo que veían sus ojos.

Entre ese desolador escenario el vizconde es testigo de su primera batalla, vio de cerca al enemigo y pudo dar muerte a uno de ellos. Por su parte, él fue pulverizado por un  cañonazo que recibió de lleno. Su cuerpo fue abatido en partes, como si sus adversarios hubieran planeado que todo el daño se causara en un solo lado. Perdió una pierna, su brazo, su costilla, una oreja, media nariz, un ojo, media frente, media mejilla, media boca, media cabeza; todo su lado izquierdo fue mutilado mientras su lado derecho no sufrió ningún rasguño. Derrotado, en esa guerra perdió media vida y medio se salvó de la muerte.

El vizconde regresa a su castillo con la mitad de lo que alguna vez fuera. Mientras su padre, el conde, espera por él en el castillo y, a causa de tanta tristeza por su hijo ausente, se refugia en una jaula gigante, donde yacen los pájaros y las aves del castillo —él era uno más entre ellos—, dormía y comía lo mismo que los pájaros, y no salía ni de día ni de noche. Una noche se corrió la voz de que el vizconde regresaba; criados, pastores, vendedores, se amontonaron en los patios del castillo esperando la entrada del vizconde. Todos murmuraban cómo regresaría, pues habían escuchado rumores de que había recibido graves heridas en la guerra. Cuando vieron que varios hombres cargaban una litera y en ella venía el vizconde, todos esperaron lo peor.

Con la mitad del vizconde Medardo, todo Terralba cayó en la desgracia. La parte humana que se había salvado era su ser malvado. Todo a su paso era partido en dos; las flores, los árboles, los animales del campo, las chozas, las rocas. Los habitantes maldijeron su regreso y temían de solo escuchar su nombre. Un buen día se enamora de una doncella que elige para esposa. Confundido por su sentimiento no la toma a la fuerza sino que le pide que lo ame. Todos en Terralba desconfían, pero empiezan a notar acciones de bondad en el vizconde y temen que sea una de sus artimañas. Pero luego descubren que es otra mitad la que actúa muy distinto.

Tan desgraciado es el uno, como excesivamente bondadoso es el otro. Así pasan los días en Terralba, todos sus habitantes confundidos entre maldad y virtud por igual inhumanas. Mientras uno castiga el otro perdona. Entre caridad y terror, todos empezaron a despreciar ambos excesos e igual rehuían al Bueno que siempre quería darles lección y bueno consejo. Pasó un día en que el Bueno y el Malo se retan y los terralbenses son testigos de la totalidad que resulta.

La historia nos ha mostrado el perjuicio de los excesos, en El vizconde demediado se aprecia claramente el daño que ocasiona tal enajenación de los sentidos.

MJHL

 

 

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