En el marco del 30 de agosto, Día Internacional de las Víctimas de Desaparición Forzada, que en México se ha vuelto un día de movilizaciones y memoria por más de 132mil personas desaparecidas, se va a inaugurar en la Universidad Iberoamericana León un Laboratorio de Resistencias contra las Desapariciones (ReDLab).

En el contexto de la persistencia del fenómeno de las desapariciones en el estado y en el país, pero también de los repertorios de resistencia colectiva frente a violaciones de los derechos humanos, planteamos desde y más allá del quehacer académico la creación de un espacio de trabajo, reflexión y afrontamiento, frente a un contexto guanajuatense y mexicano que sigue marcado por profundas brechas y múltiples formas de violencia.

La desaparición es, quizás, la más preocupante y dolorosa para las víctimas, directas e indirectas, pero también para la sociedad, pues sus efectos se expanden de manera concéntrica y dispersa, afectando comunidades y relaciones, imaginarios y libertades, futuros y presentes de cada vez más personas y colectividades.

Hasta mediados de este mes de agosto de 2025, los datos en el Registro Nacional para Guanajuato habían estado constantemente desfasados, mostrando cifras totales inferiores de 1,000-1,300 personas respecto de las que entregaba la fiscalía estatal, o sea, se reportaban al menos mil personas desaparecidas menos. Sin embargo, este mes, finalmente el RNPDNO ha comenzado a registrar un cierre de esta diferencia: las personas desaparecidas alcanzan la cifra de 5,130, de las cuales 4,186 son hombres (81.6%), 895 mujeres (17.45%), y 49 de género indeterminado (0.96%).

De hecho, todavía a la fecha del 31 de julio de 2025, en Guanajuato había un total de 4,891 personas desaparecidas. De estas, 4,705 reportadas por fiscalía estatal con registro de 2012 a julio de 2025, y 186 registradas por el RNPDNO como anteriores al 2012. Al 15 de abril eran 4,855, entonces, después de una leve disminución en junio, la cifra volvió a subir, aunque no ha habido grandes variaciones en lo que va del año. Del total (al mes de julio) de casi 4,900 personas, 147 casos son investigados (carpetas) como desaparición cometida por particulares, 10 como desaparición forzada, y 16 por delitos relacionados.

El nuevo dato que se acaba de publicar responde a las solicitudes de mayor transparencia y actualización de datos hacia las autoridades, y, por primera vez, es consistente con los anteriores, al indicar 5,130 personas desaparecidas al 20 de agosto, siendo Celaya, Irapuato, León, Salamanca, Villagrán, Pénjamo, Juventino, Silao, Acámbaro, Cortazar, Valle de Santiago y Salvatierra las ciudades con mayor incidencia, y más de 100 casos registrados.

No deja de ser preocupante, de todos modos, el hecho de que desde 2018 no han dejado de crecer los casos, sobre todo debido a la epidemia de violencia que vivimos en el estado, aunque también, en parte, a la ampliación de modalidades y canales para la denuncia.

En materia forense, Guanajuato hasta mayo de 2025, con datos de diferentes fuentes a partir del 2009, se tenían registrados aproximadamente 411 contextos de hallazgo, con al menos 724 fosas clandestinas (o puntos positivos), y una estimación de 1369 cuerpos exhumados. Estas cifras no tienen en cuenta los hallazgos masivos de 32 cuerpos en La Calera del 4 de agosto, que se tornaron “nota” nacional e internacional, pero, más allá de los vaivenes mediáticos, entre Comisión Estatal de Búsqueda, fiscalía y brigadas independientes de buscadoras, los hallazgos de restos humanos y cuerpos no han parado, así que se estima una cifra de cerca de 750 fosas ilegales registradas entre 2009 y agosto de 2025.

En este contexto de incesantes búsquedas ciudadanas y humanitarias, pese a una disminución relativa de los homicidios, no ha bajado la percepción de inseguridad en el estado, entre otros motivos porque siguen cometiéndose atrocidades, masacres, extorsiones y ocultamiento de cuerpos, lo cual impacta grandemente en la realidad cotidiana de miles de personas y en la difusión de miedo social.

En esta coyuntura, el objetivo de un laboratorio especializado, cuyo nombre y descripción, en un primer momento, fue “Laboratorio de investigación-acción contra las desapariciones”, permitiría dar consistencia y articular en un único espacio muchos esfuerzos y actividades que desde la universidad se han estado llevando a cabo en los últimos años, de la mano de colectivos y personas buscadoras, así como de otras instituciones académicas, sociales, privadas o del sector público, con énfasis en la investigación y la incidencia, el acompañamiento multidisciplinario de procesos colectivos y casos, la divulgación y formación.

Las líneas temáticas de reflexión y diálogo entre saberes, incidencia y acompañamiento que se plantean son tres y refieren a Desaparición y búsqueda de personas; Memoria, verdad y justicia; Violencias y resistencias. Dentro de cada una, se trabajarán proyectos, acciones y conocimientos que puedan abonar a la visibilización y ruptura de dispositivos y lógicas que subyacen a las desapariciones, de la mano de los colectivos y personas buscadoras.

El día 25 de agosto es cuando se presenta el proyecto a la comunidad universitaria y al público en general, y arrancan las actividades del ReDLab con una Jornada de Lanzamiento, un evento con paneles y conversatorios de reflexión y discusión sobre violencia, desapariciones, resistencias y acciones en México y Guanajuato. Integran el Laboratorio personas académicas de la Ibero León, del área de Incidencia Social y de Ciencias Sociales, pero asimismo grupos de estudiantes, otras áreas de la universidad y personas e instituciones externas, para proyectos puntuales y conjuntos.

Esto se da en el marco de una semana muy intensa en todo el país, con una serie de iniciativas y actos también en León, Guanajuato y otras ciudades del estado, en que personas buscadoras y solidarias seguirán haciendo presentes a quienes fueron desaparecidos y desaparecidas, y a marcar los puntos de una agenda que abarca desde la crisis forense, con más de 72mil cuerpos sin identificar en el país, a la relación tensa del gobierno con la ONU sobre el tema de las desapariciones forzadas, desde la reforma legislativa, que quedó “a medias”, a la protección de las y los integrantes de colectivos, víctimas de ataques directos: por ejemplo, tan solo en Guanajuato se han registrado en cinco años 6 asesinatos y 5 desapariciones en contra de personas buscadoras.

En este caminar, ha sido y seguirá siendo fundamental la alianza con organizaciones de la sociedad civil nacionales, internacionales y locales, como por ejemplo la Plataforma por la Paz y la Justicia en Guanajuato, actor central en iniciativas, atención a colectivos y la defensa de los derechos humanos en el estado, con la que se mantienen proyectos comunes.

El ReDLab está pensado, también para sensibilizar a la sociedad, fuera de los recintos universitarios, así como para dialogar y colaborar, entre otros, con interlocutores y redes de colectivos de búsqueda de personas y sobrevivientes de la violencia, de organizaciones sociales, de instituciones del Estado, del sector privado y productivo, de la academia y las universidades.

Entre los proyectos iniciales, en curso o en fase de planeación cabe mencionar algunos: el observatorio de datos y mapeo sobre desapariciones, fosas comunes y clandestinas en Guanajuato; el archivo de la memoria sobre desapariciones con entrevistas de Iguala, Guerrero, de León y Salvatierra, Guanajuato; el acompañamiento de la realización del sitio de memoria en Salvatierra; los talleres y acompañamiento a personas buscadoras y colectivos en distintos ámbitos; un seminario de reflexión sobre violencias y resistencias; las propuestas de formación, eventos y cursos especializados; la incidencia en políticas y debates públicos; la investigación colaborativa y participativa; la cuenta X de alertas, difusión de fichas, información y denuncias @DesapGto; la asesoría de casos de desaparición.

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