Culiacán, Sinaloa.- La XXIII edición de la Bienal de las Artes Visuales Antonio López Sáenz fue ‘mochada’ luego de algunos días de su inauguración.

Esto luego de que el comité de selección decidiera declarar como desierto el segundo lugar debido a que la pieza previamente seleccionada ya había sido publicada en redes sociales, lo cual no la hacía inédita como lo requería la convocatoria del certamen.

Fue así que el mismo día de la premiación [31 de enero], Alejandro Castañeda originalmente segundo lugar de la XXIII edición de la bienal, fue avisado de que quedaría fuera del evento y no se le entregaría premio alguno.

Luego de está decisión, que consideró como injusta y un tema de desigualdad, el artista publicó un video en redes sociales en donde narra lo sucedido en relación a su descalificación y, en general, acusa no haber recibido una respuesta a diversas cartas enviadas al Comité y a Cultura Mazatlán.

 

Además, Castañeda justifica que su pieza fue parte de una instalación en un estudio cerrado al público.

“Fue parte de una instalación que puse junto a unas fotografías en las que yo llevaba puesta esa pieza en el estudio de unos amigos, el evento de un día porque ya iba a ser el cierre de su estudio”, se le escucha en el video referido.

“A la obra que salió ganadora, yo le había tomado unas fotografías, haciendo un montaje en el estudio de unos amigos, el cual estaba cerrado, ahí estábamos también otros artistas, era un espacio cerrado al público, especificaciones que no venían en la convocatoria como tal”, declaró por su parte a Noroeste.

El artista también indicó que, tras el anuncio de que quedaría fuera de la premiación, él mantuvo su postura ya que sus piezas se encontraban compartidas en Instagram, como registro fotográfico, desde el momento en el que postuló a la bienal.

“Esto lo hubieran podido ver desde la preselección de artistas”, señaló, apuntando a qué el comité no realizó su trabajo de selección de manera profesional y exhaustiva o que efectivamente estos cedieron ante las presiones de la persona que denunció su pieza.

Sin embargo el tema no terminó aquí, pues en días recientes otros artistas notaron que sus piezas, que en un primer momento sí habían sido incluidas en la exposición, ya no se encontraban montadas en la misma, acto que se realizó sin antes dar un aviso o comunicar los motivos a los afectados.

Hay teléfono descompuesto

 

Otro caso polémico es el de Jorge Holcombe, quien también fue seleccionado pero se enteró de que ya no formaba parte de la Bienal cuando familiares que visitaban la ciudad acudieron a la exposición y le avisaron que su pieza no estaba montada.

“Hay teléfono descompuesto y ellos lo están provocando”, declaró a ESPEJO.

 

El artista deja claro que él no busca que su pieza se vuelva a exponer en la Bienal ni alguna otra exigencia, pero si considera que no han sido claros con los artistas en su comunicación.

“La verdad en cultura yo no me quiero pelear con nadie porque no me incumbe a mi realmente, les incumbe a ellos. Ellos fueron los que seleccionaron y seleccionaron mal. Yo no pido que expongan mi pintura, ya validaron mi trabajo, lo pusieron por redes sociales, en sus portales, ellos mismos dijeron quienes habían quedado. Pero no están haciendo lo mismo al decir que nos descalificaron. Como que se echaron pa’tras y está bien, pero no están avisando”, indicó.

 

Holcombe indica que está bien equivocarse y que todos nos equivocamos, pero refiere que lo que sí es relevante es que a partir de esta equivocación le quitaron la oportunidad a otras personas que sí habían cumplido las reglas.

Además indica que el modo de actuar de los organizadores de la Bienal deja al público un mal sabor de boca, al señalar que la gente podría pensar que se quieren quedar con el dinero del segundo lugar o que hubo un favoritismo con la persona que se quejó de la selección.

“Al parecer hubo alguien que se quejó y fue el que hizo constar el trabajo que no habían hecho ellos. Ósea les tuvo que decir alguien más lo que ellos pasaron por alto”, dijo.

“Hubieran avisado antes y no pasa nada, si incumplí yo soy el primero que va a aceptarlo. Son sus reglas y es su concurso”, añadió.

 

Respecto a lo inédito o no inédito de su obra, comentó que él había expuesto en el pasado ArtWalk de Mazatlán; sin embargo no lo incluyó en su ficha técnica ya que no lo consideró como un espacio formal de exposición.

“El alegar eso, qué es una cosa inédita o qué es una exposición, es una cosa ambigua en su convocatoria y no me voy a poner a alegar eso. Son sus reglas, las acepto. Lo que es, por así decirlo, inaceptable, es que no nos avisaran, no le dieran la oportunidad a otras personas, no están entregando un premio a alguien”.

 

“Ellos son los que deciden, pero yo no considero también que Instagram o un ArtWalk (que yo expuse un día en una casa en construcción, que no es una galería)… pero si eso tomamos como una exposición formal, pues todo mundo pudiera exponer.  Ósea, ¿yo mismo escojo mi obra y la pongo dentro de mi propia casa? Pues no, es muy poco serio eso”, añadió.

 

Al consultar con Juan José Rodríguez, quién a pesar de estar jubilado del Instituto Municipal de Cultura de Mazatlán fungió como servidor público al ser enlace entre artistas y la organización de la Bienal, niega que no se le haya dado respuesta a Alejandro Castañeda. “A él se le dio la información  y lo sabe claramente”, aseguró.

Respecto al retiro de piezas, indicó no saber nada al respecto.

Sin embargo, Castañeda asegura que lo único que recibió fue una llamada de Juan José Rodríguez, mas no una respuesta oficial o un documento que detallara formalmente el por qué de dicha revocación.

“De igual forma lo único que estoy pidiendo es un trato de igualdad. Que así como están desacreditando mi trabajo por tenerlo publicado en Instagram o por ser parte de un evento independiente, quisiera que se me dé un trato justo, ya que he enviado dos cartas pidiendo una justificación y pidiendo una apelación por este premio, y no he tenido respuesta alguna ni por parte del comité de selección ni por parte del cultura Mazatlán”, dijo Castañeda.

 

“Es que nadie responde, nadie dice nada. Como es un teléfono descompuesto no quiero decir cosas que no sé, porque realmente no sé lo que sucedió. Ese es el punto, que no sabemos si todo el mundo está especulando, y al no decir nada ellos no están arreglando las cosas”, dijo por su parte Jorge Holcombe.

Cabe destacar que este suceso generó descontento entre la comunidad artística mazatleca, la cual se encuentra organizándose con el fin de hacer una manifestación de inconformidad por lo que consideran años de atropellos a la comunidad artística mazatleca desde la Bienal Antonio López Sáenz.

Espejo pudo confirmar el retiro de las piezas tanto de Alejandro Castañeda, como de Jorge Holcombe y el artista Damián Mancha.

El jurado, que también seleccionó las 40 obras que originalmente se expusieron en la bienal, estuvo integrado por las personas Liliana Bandín Gaxiola, Víctor Manuel López de la Paz y Alejandro Mojica Díaz.