En medio de la efervescencia del Día del Amor y la Amistad, Culiacán se encuentra inmerso en una emergencia de nuevos mercados, inaccesibles para muchos pero que marcan tendencia en lo que se ha denominado “narcocultura”, fenómeno que abarca desde la estética hasta las temporalidades comerciales y que está redefiniendo los estándares de lujo y extravagancia en la región, según señala Anajilda Mondaca Cota, especialista en Ciencias Sociales y Humanidades.

Uno de los elementos más nuevos y a la par distintivos de esta cultura emergente son los llamados “Ramos Buchones”. Arreglos florales, que van más allá de lo convencional, han ganado popularidad entre aquellos que buscan destacarse y expresar un estilo de vida opulento. Según una comparativa realizada por Espejo Negocios en diferentes florerías, estos ramos pueden contener entre 50 a 500 rosas, pero ¿Cuánto cuesta comprar un ramo buchón?

Según el tamaño y la florería de elección, los precios oscilan entre los 1200 hasta los 8000 pesos. Este producto cuya creación y término fueron acuñados por el mercado al que se dirige, se ha convertido en símbolo y expresión de estatus. Incluso, en Culiacán se registra el caso de una florería que se llamaba Rosas de Amor Aky, sus ventas eran bajas, incluso en enero de 2023 tenían en promoción 25 rosas por 300 pesos, pocos meses después cambiaron el espectacular y nombre del negocio por “Ramos Buchones El Encanto”, dando un giro redondo al target de su negocio y ensanchando de este modo sus ventas.

 

La profesora investigadora jubilada de la Universidad Autónoma de Occidente explica que esta manifestación refleja una búsqueda de exclusividad, donde se distinguen dos grupos: aquellos que ya son parte del círculo y quienes aspiran a pertenecer a él. Sin embargo, este afán por acceder a la opulencia, muchas veces, lleva a endeudarse o recurrir a métodos poco convencionales para obtener estos productos exclusivos.

No obstante, este suceso no está exento de críticas. El crecimiento del consumo de productos asociados a la narcocultura genera un aumento en la oferta y la demanda, lo que resulta en un encarecimiento de estos productos para el resto de la población. Esta disparidad económica refleja una búsqueda de estatus, pero también evidencia una brecha social cada vez más marcada.

Espejo Negocios detectó a través de un escaneo en Google Maps que en Culiacán hay actualmente 120 puntos designados como florerías o floristerías, en la gran mayoría se promueve como producto especial por la fecha los ramos buchones, que, a diferencia de los ramos clásicos y minimalistas, estos arreglos no temen a la ostentación.

 

David Moreno Candil, doctor en Psicología señala que el consumo extremo y la idea de que vales en función de lo que tienes no es exclusiva del narcomundo, y ejemplificó que en la época actual existe también una similitud, que es la figura de los influencer que se exhiben como ricos y poderosos, que visitan lugares caros y visten de prendas lujosas de manera fácil. En el caso de Culiacán, el narcomundo le dá ese estándar a esta manifestación, que refleja un fenómeno más amplio de consumo y materialismo extremo.

El investigador del departamento de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Occidente (UAdeO) explica que se trata de productos o servicios que representan estatus como es el símbolo de “buchonas poderosas”, y en el caso de los mercados, que funcionan para generar ganancias, recurren a una técnica a la que conoce como la imitación social de aquello que representa ese poder y estatus, de ahí que modifiquen sus negocios conforme el target que más predomina y que se busca imitar en el mercado local.

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