Por Redacción de ZonaDocs / @ZonaDocs

 

Vacas atadas permanentemente, separadas de sus crías tras el parto, inmovilizadas con cadenas y sometidas a descargas eléctricas: estas son algunas de las prácticas documentadas por Igualdad Animal en su más reciente investigación sobre la industria láctea en España.

Realizada entre noviembre de 2023 y febrero de 2024 en explotaciones del Principado de Asturias, la investigación muestra con imágenes y videos cómo los animales son sometidos a un ciclo de explotación constante. Las vacas son inseminadas artificialmente de forma repetida para mantener la producción de leche, separadas de sus crías al nacer, y descartadas cuando su productividad disminuye, en promedio a los seis años, aunque podrían vivir hasta 25.

El informe también documenta el uso de dispositivos eléctricos conocidos como “pastores” que impiden a los animales moverse libremente, así como anillos metálicos en la nariz, golpes y manejo brusco. Algunas vacas son forzadas a caminar, pese a estar lesionadas, hasta máquinas de podología mediante descargas eléctricas.

Los terneros, por su parte, son separados inmediatamente después del parto y alimentados artificialmente con cubos o tubos. Muchos machos son enviados al rastro en pocos meses, mientras que algunas hembras son criadas para reemplazar a sus madres. En 2024, más de 762 mil terneros fueron separados de sus madres en España, según cifras de la organización.

Además del maltrato animal, Igualdad Animal denuncia que la industria láctea recibe millonarios subsidios estatales —más de 169 millones de euros en 2022— y genera un alto impacto ambiental. La organización hace un llamado al gobierno español para reorientar estas ayudas hacia alternativas vegetales que, aseguran, son menos contaminantes y exentas de crueldad.

“Los consumidores tienen derecho a conocer esta información que la industria láctea no muestra en su publicidad”, afirma Javier Moreno, cofundador de Igualdad Animal.