Culiacán, Sinaloa.- El pasado 22 de mayo, las redes sociales de Sinaloa Incluyente anunciaron a Pony Pockett como la reina estatal de la Marcha del Orgullo 2025, que se llevará a cabo el 14 de junio. Ella, junto a otras artistas invitadas, encabezará la marcha. Pero, ¿quién es Pony Pockett y cómo una drag queen que canta en vivo se convirtió en una figura clave para la comunidad LGBTQ+ en Sinaloa?

José Carlos Gerardo Lugo —originario de Guamúchil, Sinaloa— procede de un linaje de músicos y artistas, es por ello que desde la cuna estuvo rodeado de expresiones artísticas de todo tipo, lo que despertó en él una vocación escénica que comenzó a los 13 años, cuando empezó a cantar en eventos sociales.

Nunca sintió la necesidad de ocultarse. Creció con plena conciencia de su orientación sexual y con el respaldo de su familia. Una experiencia que, reconoce, no todos en la comunidad LGBT+ pueden contar.

Con el tiempo se mudó a Culiacán para estudiar Danza Contemporánea, con especialidad en Producción Escénica, en el Instituto de Cultura de Culiacán (ICIC). Aunque extrañaba a sus padres, encontró refugio en las artes y el apoyo de su hermano, quien lo acompañó en esa etapa.

Durante sus estudios realizó prácticas en el Teatro Socorro Astol y fundó una escuela de teatro musical para niños y niñas llamada Instituto de Artes Escénicas en Culiacán. El proyecto cerró con la llegada de la pandemia, que también lo dejó sin empleo ni escenario.

El nacimiento de Pony Pockett

En 2020, un amigo lo invitó a ser jurado en un concurso drag, y le propuso subirse al escenario caracterizado y cantando.

“Me invitaron a ser jurado de ese evento y me dijo mi amigo: ‘¿Qué te parece si te vistes como drag y cantas?’ Le dije: ‘Ah, bueno, sin problema’. No tenía nada de cosas, pero mis amigos me apoyaron para vestirme, y fue ahí cuando nació Pony en los escenarios.”

Su actuación sorprendió al público, que no esperaba una drag cantando en vivo. Su voz y presencia escénica rompieron el molde.

El nombre “Pony” nació como un apodo cariñoso que le pusieron sus sobrinos. Al principio se presentaba como Pony Drag, pero más adelante añadió Pockett, como una broma sobre su estatura —mide 1.79 m sin tacones— y como un sutil guiño a las muñecas Polly Pocket.

“Mis sobrinos me veían y me decían: ‘¡Pony! ¡Tío Pony! ¡Tío Pony!’. Jugábamos como al caballito, y todo era en tono de broma (…) Cuando tuve mi primera presentación me preguntaron: ‘¿Cómo te ponemos?’. Y yo: ‘Ay, no sé’. ‘¿Y cómo te llamas?’. Pues ni modo que me pusieran José Carlos. ‘¿Y cómo te dicen?’. Pony. ‘Ah, bueno, entonces Pony Drag serás’.” recuerda entre risas.

Tras su debut, fue invitada a presentarse en un certamen de belleza gay. Fue la primera vez que recibió un pago como drag, e incluso su primer pago después de estar mucho tiempo encerrada en su casa por la contingencia. Su carrera tomó impulso y pronto se convirtió en una de las figuras más destacadas del Mamma Mía Bar en Culiacán.

No solo destacó en los escenarios, sino también en los certámenes de belleza: en 2021, ganó la corona estatal y más tarde el certamen nacional Reina de Reinas México. En el año 2023 compartió escenario con la cantante María José, durante una presentación en el palenque de Culiacán. Cumpliendo un sueño para él, puesto que la considera su artista favorita.

Una marcha hecha con orgullo

Aunque su camino personal fue de aceptación, Pony sabe que no todos han tenido la misma suerte. Una historia, en especial, la marcó: la de un hombre mayor gay que vivió una vida llena de maltrato y discriminación.

“¿Cómo es posible que un adulto gay haya vivido todo lo que vivió? Me acerqué a él para platicar. Desafortunadamente falleció por una enfermedad, pero antes me contó unas historias que me dejaron pensando: No manches, ¿cómo ahora yo puedo vivir tan libremente como mujer, cuando antes a ellos los maltrataban, los apedreaban, los violentan tanto? (…) Ahora, gracias a Dios, tenemos más libertad. Y también quise reconocer y aplaudir lo que ellos tuvieron que sufrir, el camino que recorrieron para que hoy nosotras podamos correr.”

Ese testimonio —junto a muchos otros— la impulsó a organizar la primera Marcha del Orgullo en Guamúchil en junio de 2021. Ya contaba con experiencia previa, pues había apoyado a su amigo Ricardo Castro, quien organizaba marchas y eventos para la comunidad en Angostura. Aun así, aquella primera edición se llevó a cabo sin apoyo político ni grandes recursos.

“Me decidí: vamos a hacer la primera marcha para poder todo mundo mostrar nuestros colores y por lo menos un día al año ser libres, que compartan conmigo esa libertad, que no tengan miedo de ser quiénes son.”

Las siguientes ediciones fueron posibles gracias a su equipo y a recursos propios, incluyendo ahorros de sus presentaciones como Pony.

“Pony Pocket en sus giras agarra un dinerito y le invierte a comprar la bandera o las coronas. Bueno, eso sí me ayudan, me patrocinan a veces muchas cosas, ¿no? Pero todos los gastos de invitaciones, de reinas y eso pues ya nos los hacemos nosotros.”

Desde entonces, Pride Guamúchil ha crecido cada año, coronando a una reina diversa: drag, trans, aliada o no binaria. A pesar de las críticas y la oposición, incluso de grupos religiosos que los esperan con pancartas, la marcha sigue firme.

Más allá del escenario

Pony sabe que ser visible en un lugar pequeño como Guamúchil tiene costos: burlas, prejuicios, amenazas. Pero también tiene un impacto: niñas, niños y jóvenes que ahora saben que no están solos.

Además del activismo, sigue desarrollando su carrera artística. Está por sacar su primer sencillo como drag queen cantante, sueña con llegar a plataformas más grandes como reality shows, giras o apertura de conciertos.

Pony Pockett es un símbolo de libertad, arte, talento y empoderamiento de la comunidad. Es alguien que —con mucha carisma— se ha abierto paso entre aplausos en los escenarios, con la certeza de que la visibilidad puede salvar vidas.

Él es José Carlos Gerardo Lugo, de 34 años y actualmente da vida a Pony Pockett, cantante, drag queen, activista por los derechos de la comunidad LGBTQ+ y reina estatal de la doceava marcha del pride Culiacán 2025.

“Por favor, que nadie apague esos colores que tienes al mundo para mostrar. No tengas miedo de mostrarlos. Siempre vas a poder ver esa luz al final de la oscuridad y el tiempo siempre tiene la mejor razón.” concluye.

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