El puerto de Topolobampo fue incluido en el programa Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar, del Plan México que impulsa la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para fortalecer el crecimiento económico con enfoque social de algunas regiones del país, según establece el respectivo convenio que firmaron ayer la mandataria nacional y el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya.

Si bien es cierto que no es la primera vez que la terminal marítima es considerada estratégica para el comercio internacional, esta vez se trata de una serie de procesos de licitación para promover que empresas de los diferentes ramos se instalen en el lugar que desde 1872 los empresarios e ingenieros  William Jackson Palmer y Albert Kimsey Owen designaron como inmejorable punto geográfico para unir a los océanos Pacífico y Atlántico trazando la correspondiente red de transporte marítimo y terrestre.

Tal como lo retomó Rocha Moya, en Topolobampo está en curso la instalación de transnacionales como una empresa productora de fertilizantes, de capital alemán, y el pronto inicio de la planta Mexinol que es  la más grande del mundo en producción de metanol no contaminante, invirtiendo ésta 3 mil 600 millones de dólares, como base de “un plan de desarrollo del bienestar de nuestros pueblos originales de aquella zona, eso será fundamental porque habrá de mejorar las condiciones de vida de los pueblos yoremes que no solamente están en Ahome, están también en El Fuerte y Choix”.

En el discurso, la premisa del desarrollo de la zona norte del estado suena formidable, aunque falta lo más importante que consiste en lograr el asentimiento de las comunidades indígenas y rurales a través de respetarles el hábitat, tradiciones y el acceso a vidas dignas, sin que progreso sea a costa de afectarles sus derechos ni en menoscabo del medio ambiente.

A Sinaloa le urge defender y robustecer el crecimiento económico en la actual vertiente de violencia incontrolada, pero poniendo en frente el también impostergable cuidado a la sustentabilidad y sostenibilidad. Ante recursos naturales que se agotan, y la fundamental armonía entre desarrollo y la garantía de bienestar para las próximas generaciones, Topolobampo puede y debe ser un gran polo de desarrollo y también el ejemplo del modelo de negocios con firmes convicciones medioambientalistas.

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