Culiacán, Sinaloa.- Un jueves de septiembre, un hombre de 27 años ingresó a un hospital del IMSS Bienestar con una herida de bala en la pierna. De acuerdo al registro médico, fue lesionado en vía pública mientras se encontraba como peatón. Este hecho se clasificó como “violencia no familiar”, pero no se dio aviso al Ministerio Público.
En marzo, otro caso quedó asentado en los reportes hospitalarios: un hombre de 20 años fue atendido por una “agresión con material explosivo”. El hecho ocurrió en su vivienda y fue calificado como “accidental”.
Estas situaciones han ido en incremento en Sinaloa desde que en septiembre de 2024 estalló una crisis de violencia ocasionada por un conflicto interno en el cartel de Sinaloa, reflejándose en enfrentamientos y ataques directos a personas e inmuebles.
De acuerdo a información pública de la Secretaría de Salud, del 1 de enero al 17 de septiembre los hospitales públicos de Sinaloa han reportado la atención de 261 personas que llegaron por herida de bala y material explosivo, representando un incremento del 38% en comparación a todo el año 2024, cuando se tuvieron 189 casos y un aumento de casi el 98% en comparación al 2023.
Este incremento de atenciones comenzó desde octubre del 2024, cuando las atenciones por herida de bala se duplicaron con respecto al mes anterior, tal como se observa en la siguiente gráfica:
Además, en 2025 también se observa una tendencia a la alza a partir de mayo, con un incremento del 54% en comparación al mes anterior.
Esto pasa a pesar de las declaraciones de Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México, señalando como resultado la reducción de homicidios en septiembre en comparación a octubre del año anterior.
“En lo que va del mes se han cometido menos de la mitad de los homicidios ocurridos en octubre”, informó a través de X.
Los hechos se han presentado en viviendas, calles y carreteras, áreas de la construcción, comercios, y en menor medida, en áreas de deporte, instituciones y áreas de administración públicas y en escuelas.
Por ejemplo, en junio del 2025, un hombre de 20 años fue alcanzado por un proyectil causándole una herida en el hombro y brazo; el hecho ocurrió mientras se encontraba en su lugar de trabajo, en el municipio de Angostura. Fue clasificado por el reporte médico como “violencia no familiar”.
Las cifras señalan que la violencia ha golpeado principalmente a hombres jóvenes. En 2025, más de 50 pacientes con heridas de bala tenían entre 21 y 25 años de edad, mientras que en 2024, 36 pacientes tenían entre 26 y 30 años de edad.
Accidente o violencia
Los reportes médicos clasifican estos hechos con diferente intencionalidad como: accidental, violencia familiar, violencia no familiar, autoinfligido y trata de personas.
En lo que va del 2025, la mayoría de las atenciones han sido reportadas como accidentales (187), seguidas de violencia no familiar (64), violencia familiar (6) y autoinfligido (4). En 2024, también la mayoría de las atenciones fueron registradas como accidentales (138), violencia no familiar (44), violencia familiar (5), autoinfligido (1) y trata de personas (1).
A pesar de ser heridas de bala o explosivos, de los 261 casos atendidos en 2025, solo 54 fueron reportados ante el Ministerio Público, mientras que de los 189 registrados en 2024, solo 54 se canalizaron al Ministerio Público.
Agresiones con material explosivo
El uso de explosivos se ha convertido en una práctica letal durante la crisis de violencia que se vive en Sinaloa. Pobladores de comunidades de Culiacán, Badiraguato y Concordia han reportado que los grupos delictivos han utilizado drones con explosivos como una herramienta de violencia para generar daños y temor.
Foto: Copia de pantalla de video sobre explosivos en Agua Caliente de los Monzón
En el contexto hospitalario, si bien la cantidad de pacientes ingresados con heridas generadas por material explosivo es mucho menor que los heridos de bala, también representa un incremento en comparación al 2024.
En 2025, 6 pacientes fueron ingresados por “agresión con material explosivo”, de los cuales 2 de ellos eran menores de edad. En 2024, sólo una persona fue atendida por este motivo, el hecho ocurrió en una vivienda. Los hechos, en su mayoría, se registraron como “accidentales”.
La protesta del personal hospitalario
El pasado 18 de septiembre, al grito de “baleados no”, personal del Hospital General de Culiacán, encabezó una acalorada manifestación exigiendo que se habilite un hospital exclusivo para la atención de heridos de bala y pacientes de alta peligrosidad, o en su caso que sea el personal militar quien atienda a estos pacientes.
Esto como consecuencia a hechos de violencia que han ocurrido dentro de las inmediaciones, con supuestos intentos de hacerle daño a estos pacientes que se encuentran internados en el área Código Plata (espacio donde se atienden a personas heridas de bala y detenidas con observación médica).
La exigencia fue respaldada por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en Sinaloa, “No les falta razón, lo que pasa es que tienen que atenderse los hospitales públicos, sin duda, ya incluso adelantó la autoridad que iban a acondicionar aquí el viejo hospital general, precisamente para atender a los heridos de bala, pues ojalá”, indicó Óscar Loza Ochoa, titular de la CEDH.
A raíz de estos sucesos, Feliciano Castro, secretario general de gobierno de Sinaloa, indicó que se estarán tomando nuevas medidas de vigilancia y seguridad en el nosocomio:
- Credencialización del personal con diseño único. Contiene holograma y chip.
- Colocación de cámaras al interior de la unidad con Código Plata, con monitoreo interno y externo las 24 horas.
- Instalación de lectores biométricos para las personas autorizadas, quienes serán las únicas que podrán entrar a atender heridos.
- Se pasa visita de los pacientes heridos de bala, en compañía de un elemento de seguridad.
- Se mantiene la seguridad al exterior e interior del hospital, con evaluación de unidades móviles de trabajadores y visitas.
- Los pacientes de alta peligrosidad serán trasladados de forma rápida a la penitenciaría una vez que estén estables. En caso de que el paciente requiera una cirugía más, se le dará un alta transitoria a la penitenciaría, para luego regresar a los espacios de salud donde se le pueda realizar la cirugía..
Feliciano Castro indicó que estos protocolos responden a las situaciones que se han presentado recientemente.
Comentarios
Antes de dejar un comentario pregúntate si beneficia a alguien y debes estar consciente en que al hacer uso de esta función te adíeles a nuestros términos y condiciones de uso.