El 2024 fue pichicato en lo que se refiere a las lluvias, y así podemos decir que hemos estado inmersos en los últimos 15 años. Las lluvias han sido cicateras en extremo, tanto así que las presas lo único que han almacenado han sido incertidumbre y desconcierto entre el sector agrícola. La ausencia de Tlaloc ha sido palpable tanto en nuestra entidad como en el resto del país.
CONAGUA reportó en su monitor de sequía que para finales de noviembre un poco más del 30% del territorio nacional se encontraba con algún grado de sequía. Desafortunadamente ese 30% corresponde al norte de México y se extiende a Sinaloa y Durango. El granero de México inmerso de nuevo en falta de agua. Es tan magro el panorama que requiere de acciones inmediatas.
En México se destinan poco más de 90 millones de hectáreas a la actividad ganadera, por ello es un sustento importante para el sector rural, pues el “tener una cabeza de ganado ayuda a salir de una emergencia familiar”. Sin embargo, esta actividad dista mucho de ser redituable puesto que en las zonas rurales la ganadería es extensiva y poco tecnificada.
En la actualidad más de 45 millones de hectáreas enfrentan los estragos de la sequía. Considerando lo prolongado y severas que han sido todos estos años de estiaje, este sector también debe de ser considerado como prioritario en las estrategias establecidas en el programa de autosuficiencia alimentaria.
El impacto económico de la sequía en el sector pecuario tiene diversas aristas. La primera de ellas es la disponibilidad del mismo recurso agua, sin lluvias los ríos, arroyos, aguajes, pozos, y otros se mantienen secos, por lo que su acceso para el ganado es complicado, e inclusive se incrementan los costos. Por ejemplo, si el espejo de agua de un pozo se encuentra a mayor profundidad son más gastos en bombeo o en infraestructura para su extracción y almacenamiento. La falta de agua también reduce la producción de forrajes y de pastizales, además de que estos son de menor calidad por lo que los animales requieren de suplementos alimenticios. Aquí hablamos de pastizales, también la falta el maíz forrajero es preocupante puesto que este grano es toral en la dieta de estos rumiantes.
Recordemos que la ausencia de alimentos provoca desnutrición, lo que afecta el crecimiento, reproducción y la salud en general de los animales, sin mencionar el rendimiento en la producción de carne y leche. Más mermas.
Las fotos que uno observa en los diversos medios de comunicación sobre el impacto de la sequía, en la mayoría de los casos, son de ganado vacuno famélico muerto, con un grado de desnutrición extremo causal de su fallecimiento. El sector pecuario no tiene el protagonismo de su primo hermano, el agrícola, pero también la ausencia de lluvias ocasiona pérdidas económicas importantes.
No todo en Sinaloa es verde o se relaciona con la agricultura.
Datos del CODESIN nos indican que en Sinaloa el valor de la producción pecuaria en el 2023 fue de 18 mil 560 millones de pesos (MDP), dividida de la siguiente manera: 15 mil 537 MDP fue en carne en canal, de esto le correspondió al ganado bovino el 46.3%, porcino fue de 5.2%, ovino y caprino con el 0.5% cada uno, y aves con el 31.3%, los otros 804 MDP correspondió a la producción de leche, 2 mil 209 MDP en huevo, y 10 MDP en miel.
¿Cómo puede impactar la sequía al sector pecuario? Ejemplos de pérdidas económicas por la sequía en el sector pecuario son muchas y que se deben de considerar. La ganadería en nuestra entidad juega un papel importante en nuestra economía. Recordemos que la ciudad de Culiacán es la sede del grupo Viz que es el productor de carne más fuerte e influyente de México, que mantiene lazos comerciales en 18 países, comercializando carne de res, puerco y pollo, para ello tiene una red de proveedores y comercial que supera los 40 mil clientes, con una generación de más de 7,000 empleos directos y es considerada como una empresa “tractor” en el mercado agroalimentario.
Desde luego que la agricultura es importante en Sinaloa, pero el sector pecuario también se erige como una actividad económica de suma importancia en la entidad, que al igual que la agricultura depende del recurso hídrico, por ello la necesidad de garantizar un abasto de agua suficiente para el sector agropecuario.
Conviene pues pensar que los ríos, arroyos y cuerpos de agua son generadores de riqueza para la entidad y que es necesario fortalecer las estrategias que nos permitan un abasto permanente del recurso hídrico, en donde cada gota de agua cumpla su función de una manera sustentable.
Y terminamos machacando, que es la infraestructura verde la que produce el agua. La infraestructura gris la almacena, transporta y surte. Entendiendo que por más que uno exprima una loza de concreto no le sacaremos ni una gota de agua.
[email protected]
https://aaves.com.mx/
Comentarios
Antes de dejar un comentario pregúntate si beneficia a alguien y debes estar consciente en que al hacer uso de esta función te adíeles a nuestros términos y condiciones de uso.