No fue por inseguridad la renuncia de candidata a alcaldía de Elota por Morena, asegura Tere Guerra

Culiacán, Sin.- En el caso de Virginia “Vicky” Ibarra Rojas, ex candidata a la presidencia municipal de Elota por Morena, quien desistió a la contienda formalmente el día de ayer, Teresa Guerra aseguró que no fue por un tema de inseguridad, sino de salud.

Recientemente el Instituto Estatal Electoral (IEES) dio a conocer que tanto las candidatas de Morena como de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, María Yaqueline González Hernández, a la alcaldía de ese municipio presentaron su oficio de renuncia a las campañas electorales.

En el caso de María Yaqueline, la ex secretaria de las Mujeres dijo desconocer los motivos, pero de “Vicky”, aseguró conocer muy bien sus razones.

“Yo hablé con ella porque incluso me ofrecí a acompañarla, ella es una activista de la causa de la diversidad de género, es una mujer que tiene de pareja a otra mujer, es una persona muy conocida, es por eso que yo me acerqué con ella para que se mantuviera como candidata”, comentó.

“Las razones eran más familiares, ella tiene dos menores, a través de inseminación artificial ella tuvo un embarazo y tuvo cuates. Me dijo, ‘no voy a poder’, a pesar de que quería, la estaba respaldando todo el equipo de Morena, ella por razones personales se retira”, informó.

Posteriormente, Tere Guerra le cuestionó si su decisión tenía que ver con un tema de inseguridad, a lo que ella respondió que “absolutamente no”.

“Entonces, en el primer caso de la candidata de Elota me consta porque platiqué con ella de manera personal, hoy me enteró con sorpresa que hubo una segunda declinación, de ese caso si no tengo los detalles pero les puedo confirmar, en el caso de Vicky, no es un tema de inseguridad”, reiteró.

María Teresa Guerra Ochoa, quien hoy abandera la lista de Morena por una diputación plurinominal, reveló que a la ex candidata de Morena le estresaba el tema de la candidatura al grado, incluso, de terminar en el hospital.

Trató de explicar que posiblemente el asunto tiene que ver con un tema de perfiles, tener muchas responsabilidades, que al momento de irse a una contienda electoral, se siente bastante la carga.

“Son activistas y creen que es lo mismo ser un activista social, que trabajar un tema de derechos sociales de la comunidad LGBT, pero ya cuando se ve en proceso, en contienda, como que dicen no, no es lo mismo”, opinó ante los cuestionamientos de los medios de comunicación.

“Yo hablé con ella el 8 de abril, ella tiene un restaurante en Celestino Gasca, llegué con ella, porque estaba todavía como candidata y el 10 me dice que no iba poder, estuvimos Imelda Castro y yo muy al pendiente del caso. Ella es una persona con mucho reconocimiento, tiene mucha presencia en Elota y queríamos que se mantuviera de candidata, pero también sentíamos que su salud emocional, porque se sentía muy presionada”, expuso.