Culiacán, Sin.- En Sinaloa, una ola de violencia y miedo se ha extendido sobre Culiacán desde hace casi 4 semanas, mientras el sector privado sigue buscando la forma de mantenerse resiliente frente a la incapacidad probada del Estado para mitigar eficientemente el profundo impacto de la situación en la economía local.
En medio de esta situación, la reciente toma de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta de México es objeto de fe para la resolución de los problemas que la entidad atraviesa, así lo considera Martha Reyes, empresaria que encabeza la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Sinaloa.
Desde las empresas industriales hasta los pequeños comercios, la gran mayoría de sectores y rubros ha reportado afectaciones a su operación, y así lo confirma en entrevista con Espejo.
Interrupciones en las cadenas de suministros entorpecen las actividades de transformación, mientras la caída generalizada de las ventas en numerosos establecimientos comerciales frenan las utilidades de los negocios, lamenta. En conjunto, las pérdidas económicas producidas por cada día de terror en Sinaloa se calculan por encima de los 500 millones de pesos.
Esta situación ha causado zozobra entre la sociedad civil del estado, incluido el sector empresarial, quienes siguen buscando métodos disruptivos y alianzas entre entidades públicas y privadas para mantenerse operativos.
Para la representante de Coparmex en Sinaloa, la llegada de Claudia Sheinbaum al poder abre una ventana de oportunidad en la que, a falta de algo más en qué sostenerse, no queda más que tenerle fe. Incluso considera que vale la pena apostar por el futuro.
“A como estamos ahorita, tan dolidos y tan golpeados, tengo que agarrarme de la fe. La fe es creer en algo sin tener evidencia de que vaya a pasar. Hay que darle esa tela de duda para decir, bueno, capaz que ella como mujer puede tener esa sensibilidad y humanismo para atender de manera diferente“, comenta Martha Reyes a Espejo.
Resalta el estado de incertidumbre en el que Sinaloa se encuentra sumida, sin que nadie sepa qué puede llegar a pasar el día de mañana. Sobre la necesidad de la nueva presidenta de México de involucrarse en la pronta resolución de la racha violenta en el estado, Reyes declara:
“Es demasiado inteligente como para no saber qué pueda sugerirnos o cómo apoyarnos con esto. Le conviene. Somos el granero de México, el proveedor de alimentos más importante. Podemos ser el mejor recurso para ella para que empiece a lucir su gobierno desde el principio. Es a lo que le estoy apostando. Es fe, porque evidencia no tengo”
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