Esta semana comenzó la Conferencia de las partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica (COP16) en Cali, Colombia. En esta reunión se espera que representantes de 196 países presenten sus planes para cumplir las 23 metas que se definieron hace dos años, cuando se firmó el Marco Mundial de la Biodiversidad Kunming-Montreal.
Una de estas metas es la número ocho, que habla sobre el compromiso de “reducir los efectos del cambio climático y la acidificación de los océanos en la diversidad biológica, y mejorar su resiliencia mediante la mitigación, la adaptación e intervenciones de reducción del riesgo de desastres”.
Este objetivo es uno de los más urgentes teniendo en cuenta que en 2023, el nivel del océano alcanzó un máximo histórico, un escenario peligroso para las miles de comunidades costeras que podrían desaparecer.
En alianza con Vorágine, Plaza Pública y el Centro de Periodismo Investigativo de Puerto Rico, en Mongabay Latam investigamos los graves impactos que está generando la crisis climática en los mares y comunidades costeras de la región. ¿Qué países están en peligro? ¿Cuántas personas podrían resultar seriamente afectadas?
Miles de personas desplazadas, comunidades destruidas por las olas, alerta por islas que quedarán sumergidas. Estas son algunas de las consecuencias que está dejando a su paso el aumento del nivel del mar en América Latina.
“Ese miedo al futuro que ustedes sienten cuando escuchan sobre el cambio climático, nosotros lo estamos viviendo”, dice Aurea Sánchez, habitante de la comunidad de El Bosque, en el estado de Tabasco, al sur de México, en donde hasta mediados de 2024 el océano se ha tragado más de 500 metros de playa y ha derribado cerca de 70 casas.
Playas, casas, escuelas, iglesias, postes eléctricos y las raíces de toda una comunidad se las ha tragado el mar en El Bosque, en Tabasco, al sur de México. En esta zona, la erosión costera ya es una causa de desplazamiento forzado. Los pobladores llevan más de cinco años solicitando que el gobierno los reubique y hasta el momento no han recibido ninguna respuesta.
Tres miembros de una comunidad wayúu de La Guajira demandaron al Estado colombiano para exigir acciones urgentes de mitigación por la erosión costera que ya ha desplazado a algunos muy lejos de su tierra. De fallar a favor, este caso sería un hito para todas las comunidades que están a punto de desaparecer por el avance del océano en otros lugares del país. Pero esa decisión, por ahora, está lejos. En alianza con Vorágine, investigamos la situación.
¿Sabías que proyecciones globales anticipan que en los próximos 75 años ciudades enteras en el mundo desaparecerán debido a la subida del nivel del mar? En Guatemala, las áreas urbanas en riesgo de ser cubiertas por agua están ubicadas en Izabal, Escuintla, Santa Rosa y Jutiapa. En alianza con Plaza Pública viajamos a estas zonas y encontramos que las comunidades ya han tenido que trasladar los cuerpos de sus familiares difuntos debido a que el mar se está tragando lentamente el cementerio de Iztapa.
Debido al incremento del nivel del mar, en Panamá 285 familias han sido trasladadas desde la isla Cartí Sugdup hacia una nueva urbanización construida por el gobierno. Viajamos a esta zona del país y encontramos que la reubicación ha puesto en grave peligro a una importante área protegida. Además, algunos pobladores indígenas temen que su modo de vida cambie por completo.
En el municipio de Arecibo, en Puerto Rico, el miedo y la ansiedad que genera la erosión de sus playas se apodera de los habitantes. En esta zona del país, el mar se tragó una comunidad entera y actualmente amenaza con avanzar sobre varios barrios. En alianza con el Centro de Periodismo Investigativo de Puerto Rico viajamos a este lugar y lo que encontramos es alarmante.
***
Este trabajo fue realizado por Mongabay Latinoamérica. Para consultar el contenido original, dar clic aquí.
Comentarios
Antes de dejar un comentario pregúntate si beneficia a alguien y debes estar consciente en que al hacer uso de esta función te adíeles a nuestros términos y condiciones de uso.