El turismo abre una puerta al cielo en el Triángulo Dorado

Badiraguato, Sinaloa.- Una puerta al cielo que permite apreciar en todo su esplendor la sierra sinaloense es la nueva atracción turística de Surutato, Sinaloa.

El mirador La Piedra en Surutato, municipio de Badiraguato, inauguró una puerta al cielo como la última atracción enfocada en promover el turismo y quitar el estigma del narcotráfico al municipio sinaloense.

Inaugurada este martes y disponible para el público a partir de este miércoles 14 de febrero, la puerta invita a los visitantes a pararse ‘en el aire’ al ser su piso un cristal reforzado que permite ver el acantilado bajo los pies. Una experiencia que el empresario Omar Ortiz califica como ‘de mucha adrenalina’.

Omar Ortiz, miembro de la familia impulsora del Mirador La Piedra, explicó que la idea surgió de una atracción similar que existe en San Luis Potosí; sin embargo, añadió que en Surutato la atracción se encuentra a mil 790 metros sobre el nivel del mar y simula estar realmente parado sobre el cielo cuando las condiciones de neblina lo permiten.

“Que los inversionistas sigan apostando por este destino habla del crecimiento que se ha tenido en este bello municipio”, opinó Estrella Palacios durante el acto inaugural.

“Somos un gobierno que busca crecer en todos los sentidos, pero le hemos puesto el dedo en el renglón al tema del desarrollo económico enfocados en el turismo”, añadió el alcalde de Badiraguato José Paz López Elenes.

Ésta es la última de una serie de inversiones públicas y privadas que van enfocadas en impulsar la vocación turística de Surutato, muchas de las cuales no han estado libres de polémica.

A partir de la administración del alcalde José Paz López, algunas obras en este sentido han sido la descartada idea de crear un museo del narco y la creación de un mirador con un monumento gigante de San Judas Tadeo, como estrategia para la atracción de turismo religioso.

La puerta al cielo, una iniciativa de inversión privada, se circunscribe a esta serie de programas y actividades, a la que se suma también la construcción de un puente bimodal atirantado y la activación de un corredor cultural con distintos monumentos en el Malecón de Badiraguato.

“Necesitamos generar más alternativas y está es una de ellas. Las primeras cabañas se pusieron en el 2007 y ahora ya tenemos más de 200 cabañas en Badiraguato”, dijo a ESPEJO el Secretario del Ayuntamiento de Badiraguato, Jesús Enrique Salazar. Además, contó cómo a través de la Impulsora de Turismo de Badiraguato A.C., Codesin (Institución público-privada integrada por empresarios y funcionarios públicos para influir en las políticas públicas para la competitividad y el desarrollo) ha estado apoyando en está labor.

En un día bueno en el mirador la Piedra han acudido hasta 3 mil personas”, añadió Omar Ortiz. En este ánimo, dijo que cada dos años quieren innovar en sus atracciones.

“Surutato tiene 15 años que está empezando a llegar las personas y uno se da cuenta que no nada más es cabañas, tenemos que entretener a las personas. Nos ha resultado a nosotros”, contó. Algún día, añadió, tendrán hasta un restaurante. La iniciativa privada está ávida de invertir en Surutato.

Otra necesidad para el turismo y en la que también trabaja el municipio es una serie de proyectos de obra y equipamiento público que faciliten la estancia de los turistas, como iluminación, pavimentación y drenaje para las más de 200 cabañas que hoy tiene la región.

“El compromiso es seguir haciendo obra pública que venga a reforzar lo que tenemos. El impulso al turismo local lo hemos logrado con drenaje, servicios y pavimentación”, señaló López Elenes.

Luego de un sexenio en el que Quirino Ordaz Coppel, un gobernador hotelero, se dedicó a posicionar a Mazatlán como uno de los mejores puertos de playa a nivel nacional (con las consecuencias que esto ha tenido para el crecimiento de la ciudad y su población), el Gobernador Rubén Rocha Moya ha volteado la mirada a las zonas rurales y serranas como Surutato.

Originario de Batequitas, también en la sierra de Badiraguato, Rocha Moya ha impulsado programas como Visita Sinaloa, que promueve el turismo local a bajo costo a comunidades rurales; Pintando Sinaloa, que promueve el pintado de las casas de las comunidades de colores pintorescos; y el programa de Pueblos Señoriales, una identificación estatal parecida a los Pueblos Mágicos de la secretaría de turismo federal. Actualmente ya son 12 los pueblos señoriales que se suman a los Pueblos Mágicos en Sinaloa.

Uno de estos pueblos señoriales es Badiraguato, pero la intención de las autoridades, municipales y estatales, es que sea nombrado Pueblo Mágico por la federación y, a su vez, nombrar a Surutato como Pueblo Señorial.

El triángulo… de la bondad

Durante el último sexenio, el Triángulo Dorado fue un tema recurrente en la conversación pública nacional. Esto debido a sucesos como el juicio de El Chapo Guzmán en Estados Unidos y las visitas del presidente Andrés Manuel López Obrador para revisar los avances de la carretera Badiraguato-Guadalupe y Calvo. Fue en uno de estos viajes en los cuales el presidente detuvo su caravana y bajó de su vehículo para saludar a la mamá del Chapo, la señora Consuelo Loera (DEP).

Ante las constantes críticas al respecto, el presidente cambió el nombre a la zona, popularmente conocida como el Triángulo Dorado, a el Triángulo de la Bondad. “La gente de Badiraguato es gente buena”, declaró en su momento.

Aprovechando la oportunidad del nombre, desde el Congreso de Sinaloa el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Feliciano Castro Meléndez empujó en el 2023 el asignar en el presupuesto estatal 20 millones de pesos etiquetados al Triángulo de la Bondad. El cual, reporta El Sol de Sinaloa, no se alcanzó a ejercer completamente por la Secretaría de Desarrollo Económico durante el año. Para este 2024, el Triángulo de la Bondad tiene asignados 5 millones de pesos.

¿Narco? Eso aquí ya no existe

Al platicar con las personas, hombres y mujeres reconocen que la sindicatura no es la misma que hace apenas unos años y que, en Surutato, quien no trabaja es porque no quiere. También opinan que, quizá, si no hubiera turismo, los pueblos de la zona fueran ya pueblos fantasma.

Sergio López tiene cinco años dedicándose a los servicios turísticos. Actualmente tiene una cabaña para renta y tres camionetas en las que ofrece paseos por distintos puntos de la zona, y opina que poco a poco a la gente le ha ido entrando el ‘chip’ de que el presente y el futuro de Surutato es el turismo.

No niega el pasado de la sindicatura, dónde no había modos de subsistencia más allá actividades como la tala de madera o la siembra de marihuana o amapola.

Pero, así como cambian los tiempos, las modas y las tendencias de consumo, en años recientes la siembra de estas plantas dejó de ser rentable. “¿Y quién le va a meter dinero para sacar menos?”, se cuestiona.

Por su parte Gilberto López, adulto mayor que al que alguna vez le tocó trabajar en los cultivos de marihuana y amapola, asegura que el narcotráfico en Surutato es cosa del pasado, también aduciendo motivos económicos.

“En los últimos dos años casi se regala. ¿Para qué sembrar si sale tan caro?”, reflexionó.

Para Pascual, de oficio albañil, los últimos años han sido buenos para el municipio. En Surutato, cuenta, además del turismo también hay mucho trabajo en la construcción, situación que se observa a simple vista desde el centro de la sindicatura.

“Y los narcos, pues que vamos a decir de ellos. Nada más uno no se mete”, sentenció.

Edna, empleada de una purificadora de agua, bromea diciendo que quizá ya hay más cabañas que casas, pues reconoce que el pueblo vive de esta actividad.

¿Y antes de que vivían?, se le cuestiona.

“Pues para que le voy a decir que del narcotráfico”, responde.

Luego de la inauguración de la puerta al cielo, el alcalde José Paz y la secretaria de turismo Estrella Palacios, encabezaron una entrega de apoyos para vivienda en la que también se regalaron dulces y juguetes, despensa, colchonetas, se rifaron bicicletas y se llevó un show del Payaso Cometín.

Un buen número de personas acudió al llamado de la alcaldía, mientras alrededor la vida pasaba en un ambiente de tranquilidad. Un atardecer bello como sólo los sinaloenses, acompañó al pueblo a recibir los apoyos, mientras en los alrededores se observan elementos del ejército y un par de habitantes con radio y pistola a la cintura.

Sin embargo, quizá, Badiraguato ya ha encontrado en el turismo una puerta al cielo, y sus mismos pobladores no le ven a esto marcha atrás.

La puerta al cielo

Parte del Mirador La Piedra, la inversión para activar La Puerta al Cielo, señala Omar Ortiz, fue de alrededor de un millón de pesos; tendrá un costo al público de 80 pesos por persona y 150 por pareja en un horario de 9 AM a 5 PM. Cabe destacar que no se permite entrada a menores de 12 años; menores de más de 12 pueden subir con la compañía de un adulto. La atracción cuenta con la aprobación de seguridad por parte de Protección Civil, el peso máximo es de 500 kilos; sin embargo solo se permitirá el acceso a dos personas de manera simultánea. Además de La Puerta al Cielo, el Mirador La Piedra también cuenta con el Columpio al Vacío y una habitación romántica que incluye desayuno, botella de vino y una vista envidiable.