Mundo.- La Universidad Estatal de Colorado (CSU) pronostica una temporada de huracanes en el Atlántico de extrema actividad para 2024. Se anticipa un posible récord de 23 tormentas con nombre, de las cuales 11 se convertirían en huracanes y 5 alcanzarían la categoría 3 o superior.

Esta predicción sombría supera ampliamente los promedios históricos.

El equipo de meteorología tropical de la Universidad de Colorado pronostica en su primer informe para 2024, publicado este jueves, un número considerablemente mayor al promedio de 30 años para huracanes y tormentas. También supera significativamente el recuento de 2023, que registró 20 tormentas, 7 huracanes y 3 huracanes de categoría 3 o superior.

Este es el número más alto de tormentas y huracanes que el equipo de CSU ha pronosticado en cualquiera de sus informes de abril desde 1996. Anteriormente, habían pronosticado 19 tormentas en abril de 2022 y 9 huracanes en varios informes de abril, incluyendo 2022, 2013, 2011, 2007, 2006 y 1999.

Dos razones principales:

 

Calor récord del Atlántico: La temporada de huracanes generalmente comienza cuando las temperaturas del agua alcanzan los 27°C, lo que suele ocurrir entre el 1 de junio y el 30 de noviembre. Cuanto más cálidas y profundas sean las aguas del océano, más fuerte puede llegar a ser un huracán.

Marzo marcó el duodécimo mes consecutivo con temperaturas récord en el Océano Atlántico Norte para esa época del año, según Brian McNoldy, científico tropical de la Universidad de Miami.

Dado que las temperaturas del agua de la cuenca del Atlántico a principios de la primavera se correlacionan con la actividad de la temporada de huracanes, esta es una señal preocupante.

El Niño se convertirá en La Niña: A diferencia del año pasado, un factor que tiende a frenar la formación de huracanes desaparecerá esta temporada. El actual El Niño fue descrito como “superficial” por Phil Klotzbach, jefe del equipo de pronóstico de CSU, en una presentación en la Conferencia Nacional de Clima Tropical celebrada en South Padre Island, Texas, el jueves.

El Centro de Predicción del Clima de la NOAA pronostica que el El Niño actual se disipe y se convierta en La Niña para el punto álgido de la temporada de huracanes. Esto es importante porque es una de las influencias más fuertes en la actividad de la temporada de huracanes.

Esto significa que en lugar de que El Niño actúe como un freno suave para la temporada de huracanes, La Niña podría acelerar la formación de estas tormentas.

En 2023, a pesar de El Niño, las aguas del Atlántico excepcionalmente cálidas generaron 20 tormentas, siete huracanes y tres que alcanzaron la intensidad de categoría 3 o superior.

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