La semana pasada fue nombrada como nueva presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), en su delegación Culiacán, la empresaria Karla García Beltrán. En entrevista para Revista Espejo, explica la forma en que su presidencia pretende atender las necesidades de un sector restaurantero local que ha venido experimentando graves afectaciones en su operación debido a la ola de violencia que hoy se ciñe sobre la capital sinaloense.

Actualmente el mayor reto es la parte de reactivar la vida nocturna, el horario nocturno. Claro que hay un factor que no podemos manejar desde nuestro lugar, que es la parte de la seguridad, entonces vamos a ir viendo como podemos ir gestionando y buscando que nos apoyen. Obviamente, también el desempleo. Hay desempleo porque no podemos sostener la planilla que normalmente trabajábamos“, explica.

 

Desde septiembre de 2024, sobre Sinaloa se ha desatado una ola de violencia con epicentro en Culiacán y sus sindicaturas. Esta se ha manifestado en un repunte de la actividad delictiva, con constantes enfrentamientos armados entre grupos antagónicos del crimen organizado.

Además de las pérdidas humanas que esta “guerra” ha supuesto, mismas que al cierre de enero sumaron 795 víctimas mortales, también se ha generado una crisis económica que ya ha provocado el cierre de cientos de negocios. Uno de los sectores donde la afectación es más evidente es el restaurantero. Altamente dependiente del consumo nocturno, ve una caída en sus ingresos dado el resguardo autoimpuesto en el que entra la ciudad a partir de las 9 de la noche.

Del 9 de septiembre de 2024 al 21 de febrero de 2025, la cámara empresarial comunicaba que, por lo menos, 38 restaurantes habían tenido que cerrar.

“Lo más importante para mí es escuchar a los socios desde su trinchera, desde sus necesidades. Hay varias definiciones de restaurantes: desayunos, comidas, cenas, postres; y cada uno tiene una necesidad completamente diferente. Para mí, lo más importante es escucharles y, con base en ello, comenzar a armar una estrategia donde se deba de hacer”.

 

Pese a que siempre han existido retos para el sector, señala, hoy las principales preocupaciones de la industria se centran en los cambios en el panorama de negocios que provoca la crisis de seguridad.

“Es reestructurar, también, nuestras formas de trabajar para poder sostener y que el restaurante se siga manteniendo, por lo menos, en su punto de equilibrio. Hay mucho cambio en el consumo, y es necesario ir identificando las áreas de oportunidad”.

 

La empresaria con 25 años de experiencia en la industria restaurantera destaca la importancia de nutrir las estrategias de la cámara con las posturas de cada uno de los actores de la misma. Con este fin, es que planea la creación de mesas de trabajo con sus agremiados. Entre sus objetivos, está el de incidir en la creación de políticas públicas que beneficien al giro que representa.

Al preguntar sobre las diferencias que habrá entre su administración y la de liderazgos pasados, Karla García expone:

“Ahorita va a haber ciertos factores que no estaban en la administración pasada, hoy vivimos otra realidad, y con base en ello se van a ir tomando las decisiones. Mi disponibilidad es de mucha coordinación y comunicación, iniciando por cada uno de nuestros socios. Eso es lo que nos va a fortalecer”.

 

Actualmente, la Canirac de Culiacán tiene alrededor de 250 negocios afiliados en la ciudad.

Más información sobre Canirac de Culiacán: