Sinaloa.- Ésta semana, se anunció desde el Banco de México la decisión de ejecutar un recorte en el tipo de interés de 25 puntos base, fijando ésta en 11 porciento. Se trata del primer recorte que sufre el parámetro en más de 3 años, desde que Banxico mantiene una política monetaria restrictiva con el fin de frenar la inflación.

Aunque la estrategia de contención sigue categóricamente vigente, como expresa el propio Banco Central en el documento donde aborda el anuncio, este recorte marcaría el inicio de un ciclo de bajas a la tasa de interés. Así lo afirma el Área de Estudios Económicos de Citibanamex, que estima que los recortes continúen a lo largo de lo que resta de este año, hasta cerrar el 2024 con el tipo de interés en 8.5 porciento.

Sin embargo, el dato de la inflación de la primera quincena de marzo puede poner en tela de juicio dichas predicciones.

 

Según la información del INEGI, la inflación a tasa anual se ubicó en 4.48% al final de la primera mitad de este mes. Este resultado representa un repunte superior al que ya estimaban los analistas, de 4.45%, según muestra una encuesta de Reuters. En comparación, el mes de febrero cerró con una inflación anualizada de 4.35%.

Si la inflación continúa acelerándose por encima de las predicciones, el curso lógico de acción por parte de Banxico sería mantener las tasas en porcentajes altos durante un tiempo más prolongado de lo previsto.

El recorte de tasas fue congruente con las expectativas del mercado. Banxico decidió adelantársele a la Reserva Federal de los Estados Unidos para comenzar el recorte y, sin embargo, el tipo de cambio lleva sin verse afectado de la manera en que se esperaría al efectuar un cambio de política monetaria de esta naturaleza.

Una baja en dichas tasas suele estar asociado con una depreciación importante de la moneda, pues se reduce el retorno de inversión que los activos denominados en pesos ofrecen y, junto con ello, la demanda de la divisa también baja.

Aun así, las fluctuaciones en el valor de cotización del peso mexicano frente al dólar muestran una depreciación que ha sido catalogada como débil, acumulando 0.5 porciento de pérdidas entre jueves y viernes, desde el día del anuncio. Esto representa 7.9 centavos.

Así, el peso mexicano abrió la semana el lunes en 16.69 pesos por unidad, y la cierra el viernes en 16.75.

Lo que sí ha subido considerablemente son las apuestas de las posiciones especulativas netas a favor del peso mexicano, del mercado de futuros de Chicago. Esta semana llegaron a un máximo nunca visto, además de hilar ya 54 semanas al alza, desde el 8 de marzo de 2023 hasta ahora.

Por su parte, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), indicador generalmente usado para medir el desempeño de la Bolsa Mexicana de Valores, registró una ligera ganancia de 0.7 porciento el día del anuncio, para después perderla el viernes, cuando se contrajo 0.8 porciento.

Pese a ello, consolidó una ganancia semanal previa al jueves, abriendo con una cotización de 56,637.15 el martes y cerrando en 56,610.54 pesos por unidad. Una apreciación semanal del 0.84%, impulsada por el buen desempeño en bolsa que tuvieron muchas de las mayores empresas listadas en la BMV. Algunas de las empresas con desempeño positivo en bolsa a lo largo de esta semana fueron Grupo México, Alsea y Liverpool, todas incluidas en el IPC.

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