Culiacán, Sinaloa.- Para desarrollarse como profesionista de alto nivel, emprendedor o empresario, y superar cualquier reto en el camino para seguir en crecimiento se requiere de una fórmula que no falla, y en ello coinciden cuatro mujeres excepcionales, cada una en su ámbito, quienes en entrevista para Espejo Negocios y en el marco del Día Internacional de la Mujer comparten como convicción unánime: pasión y determinación, cimientos sobre los cuales han construido sus éxitos profesionales y personales.

Los números son fríos, reflejan una realidad preocupante donde las mujeres enfrentan obstáculos para ingresar, mantenerse y progresar en el ámbito laboral ya que, a pesar de los esfuerzos, la participación femenina ha cambiado poco en las últimas décadas, creciendo solo cinco puntos porcentuales entre 2005 y 2023, ritmo que de continuar así llevará 119 años para alcanzar la igualdad de participación económica entre géneros.

Las historias de estas mujeres no solo reflejan logros profesionales, sino también un equilibrio delicado entre la carrera y la vida familiar en un panorama laboral desafiante para las mujeres en México, donde la tasa de participación laboral femenina es del 46.5%, con un marcado contraste del 76.4% de los hombres, cifras que revelan una brecha significativa que persiste con el tiempo.

Diana  Yadira Calva Espinosa dice que enfrentó el dilema de convertirse en madre mientras se sumergía en su carrera profesional, tras años de postergar la decisión finalmente consumó dar la bienvenida a su primer hijo en 2016. Sin embargo, esta elección no estuvo exenta de preocupaciones y desafíos logísticos.

Actualmente, desde la dirección de laboratorios clínicos y estudios complementarios en Salud Digna considera que el equilibrio perfecto entre el trabajo y la familia es una ilusión, pues en su experiencia no se puede dividir la atención en partes iguales entre ambos roles. En cambio, aboga por entregarse por completo al momento presente con pasión y determinación, ya sea en la oficina como ejecutiva o en casa como madre y esposa.

“Yo creo que tienes que estar en el momento en el que estás, aquí ahorita yo estoy trabajando, estoy con proyectos muy grandes en Salud Digna, me apasionan, los hago, funciona y trabajo para ellos; y cuando estoy en mi casa soy la mamá de Diego, la mamá Esteban, y la esposa de César al 100 por ciento, y mis ojos, mi mente, mi corazón, mi tiempo, y mis manos son de ellos. Yo creo que la mujer que esté buscando tener un equilibrio personal y profesional se va a frustrar y va a sufrir y va a llorar todos los días porque no existe, no existe, no hay manera”.

 

La empresaria Josefina Flores García dice que su motivación va más allá del éxito empresarial, tiene un sueño claro: ser una madre presente y dedicada. Su esfuerzo en JOFIRE no es solo para asegurar su futuro financiero, sino también para construir una base sólida que le permita disfrutar de la maternidad cuando llegue el momento. Esta dualidad entre la pasión por su empresa y el deseo de ser una madre amorosa es el motor que impulsa cada una de sus acciones.

Reconoce que ha enfrentado discriminación por ser mujer en un sector dominado por hombres, enfrentó el escepticismo y la discriminación desde el principio y en lugar de desanimarse, lo utilizó para impulsar su determinación. Con una estrategia inteligente y una actitud serena, desafió los estereotipos de género y demostró que su capacidad y conocimiento no conocen límites de género.

“Realmente es un sentimiento que nace y que lo vas a lograr, porque lo vas a lograr, ya después en el avance te vas dando cuenta que las cosas se van dando, hasta donde quieras llegar. Juan Carlos -su socio- lleva la parte de detección y yo llevo la parte electrónica donde entran los sistemas de estacionamientos, los sistemas de videovigilancia, ambos somos especialistas en cada área, pero hay momentos en que hay clientes que, aunque son mi sistema prefieren que los atienda él, todavía hay esa parte, pero estratégicamente tampoco me voy a poner a decirles NO, que la mujer”, explica.

 

Por su parte, Irma Alicia Ríos Núñez casi con dos décadas al frente de Rancho Ayuné SA de CV continúa su labor con pasión y determinación, y ahora lleva consigo el sabor único y la calidad inigualable de “La Fresa de Ayuné” a los hogares de Culiacán y con pruebas en proceso para lograr ir más allá.

Con la mezcla entre pasión y pragmatismo alienta a otros a seguir sus pasos en el mundo del emprendimiento. Reconoce los tropiezos inevitables en el camino, pero enfatiza la importancia de mantener una actitud resiliente y aprender de cada experiencia. “Te vas a caer y te vas a levantar”, testifica. “Lo importante es que tu actitud te haga seguir de pie y seguir adelante”.

Mientras que Ariadna Gil Inzunza, gerente divisional de Estrategia y Planeación de Mercadotecnia en Grupo Coppel ha centrado su enfoque siempre en el cliente. Conocer a fondo las necesidades y deseos del cliente ha sido su mantra, pero su viaje no ha sido solo profesional, en el transcurso de su carrera ha experimentado transformaciones personales, desde el amor hasta la maternidad.

Dice que el éxito en el trabajo y en la vida familiar no sería posible sin esa red de apoyo sólida. Desde su esposo hasta sus colegas en Grupo Coppel y reconoce la importancia de tener personas que la respalden en cada paso del camino, una red que no solo le brinda el apoyo necesario para sobresalir en su carrera, sino que también le permite ser la madre que desea ser.

“Ser mamá es el trabajo más grande que hay en el universo”, expresa con emoción. Para Ariadna, combinar su carrera profesional con la maternidad ha sido un desafío gratificante, pero no exento de sacrificios. Sin embargo, su determinación y energía incansable la impulsan a seguir adelante, buscando siempre mejorar en todos los roles que desempeña.

 

En un mundo de desafíos y adversidades, estas cuatro mujeres inspiran con su enfoque centrado y su búsqueda constante de la excelencia. El camino hacia el éxito, pavimentado con trabajo arduo, pasión y propósito es un recordatorio de que, con determinación cualquier reto se puede superar y cualquier meta se puede alcanzar.

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