Culiacán.- La violencia es un problema de salud pública, pues tiene graves repercusiones en la salud física, mental y social de quienes son víctimas, y también de la sociedad en general. Por ello, la Secretaría de Salud del Estado de Sinaloa cuenta con un programa para reeducar a las personas agresoras que han ejercido violencia hacia su pareja.

Gerardo Kenny Inzunza Leyva, director de Prevención y Promoción de la salud de la Secretaría de Salud de Sinaloa, explicó que es un programa que atiende tanto a mujeres agredidas como a hombres agresores y violentos, con el fin de evitar la normalización de conductas violentas y concientizar para que estas agresiones no vuelvan a ocurrir.

“La violencia es el resultado de ciertos factores determinantes, a veces el estrés, a veces la falta de oportunidades, la falta de empleo, problemas de drogadicción. Las consecuencias es la desintegración de la familia, los golpes, las lesiones y pues lamentablemente en algunos casos pueden llegar a matar a alguien. Entonces, la finalidad es evitar que haya agresiones, evitar que alguien fallezca y tener un núcleo familiar integrado”, dijo.

 

Mencionó que en 2023, un total de 578 mujeres fueron atendidas en 48 grupos de intervención, donde se les enseñó a  identificar las violencias de las que fueron víctimas y se les dio herramientas para volver a participar de manera plena en su vida pública y privada.

Mientras que, ese mismo año se atendieron a 406 hombres en 48 grupos de intervención donde personal especializado les brindó talleres de sensibilización y concientización para que no vuelvan a incurrir en actos violentos.

“Por ejemplo, si ellos están discutiendo con la pareja se les enseña que es mejor que se calmen, que se alejen, que regresen al ratito, que no caigan en provocaciones. Se les atiende a ellos porque también ellos pueden ser el resultado de otras violencias que hayan sufrido en su niñez”, dijo.

 

Estos talleres de reeducación también se le otorga a niños, niñas y adolescentes, a quienes se les enseña a identificar los tipos de violencia y evitar agresiones.

Con esta reeducación, explicó Inzunza Leyva, se busca romper la cadena de violencia y evitar situaciones lamentables como daños físicos u homicidios. Por ello, se enfocan talleres en centros de rehabilitación y penitenciarias.

“Trabajamos con diferentes instituciones, trabajamos con el tribunal de justicia, trabajamos con las empresas públicas, con la sociedad, trabajamos en las primarias, en las secundarias y en las preparatorias. Y buscamos en las colonias donde las estadísticas marcan más violencia para enfocarnos”, dijo.

 

Mencionó que aquellos que deseen participar en estos programas, ya sea como víctimas que buscan ayuda o agresores dispuestos a reeducarse, la dirección de Prevención y Promoción de la salud de la Secretaría de Salud de Sinaloa está disponible para recibir consultas y proporcionar información detallada sobre cómo unirse a este programa.

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