Beirut.- Irán lanzó un mensaje contundente a Israel tras los ataques nocturnos del domingo, al declararse vengado por el bombardeo a su consulado en Damasco. Incluso advirtió al país vecino que no inicie una respuesta militar.

La misión iraní ante la ONU anunció que el “caso puede considerarse cerrado” apenas tres horas después del primer ataque directo desde territorio iraní a Israel.

El presidente iraní, Ebrahim Raisi, advierte a Israel y sus aliados sobre posibles consecuencias “más fuertes” si toman acciones imprudentes.

 

Fue durante los primeros minutos del domingo 14 de abril, cuando Los Guardianes de la Revolución llevaron a cabo más de 200 ataques con drones y misiles contra objetivos militares israelíes, celebrando que todos los objetivos habían sido alcanzados con éxito.

El mensaje iraní a la ONU intentó justificar la acción militar como legítima defensa en respuesta a la agresión contra su sede diplomática en Damasco.

Desde la destrucción del consulado iraní, las autoridades de ese país han expresado su determinación de “castigar” a Israel, como lo había advertido el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei.

Este ataque marca un cambio en la política de Irán hacia Israel, que hasta ahora se había abstenido de ataques frontales, prefiriendo apoyar a grupos como Hezbolá y los rebeldes hutíes yemeníes. Además, Irán capturó un portacontenedores “vinculado” a Israel en el estrecho de Ormuz, mientras que la Cancillería iraní convocó a los embajadores de Francia, Reino Unido y Alemania por sus posiciones respecto a los ataques.

Irán también envió un mensaje a Estados Unidos, advirtiendo que sus bases ya no serán seguras si cooperan con Israel. El canciller iraní, Hossein Amir-Abdollahian, aclaró que el objetivo del ataque era castigar a Israel y no a las bases estadounidenses en la región, aunque advirtió que podrían ser atacadas si están involucradas en la defensa y apoyo a Israel.

El clima de tensión se refleja en Teherán, donde un mural inaugurado después del ataque muestra la determinación de seguir enfrentando a Israel, mientras miles de personas corean consignas contra Israel y Estados Unidos en la plaza Palestina.

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