Culiacán, Sinaloa.- En Culiacán las autoridades no tienen un plan para atender y mitigar los efectos del cambio climático, pues el Ayuntamiento carece de los instrumentos de política pública ordenados para ello y el que existe se encuentra actualmente desfasado.

Según el artículo 20 Bis 4 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), es obligación de los municipios elaborar programas de ordenamiento ecológico local. Esto con el fin de determinar áreas ecológicas y sus condiciones, así como regular los usos de suelo para proteger el ambiente y preservar, restaurar y aprovechar de manera sustentable los recursos naturales.

Pero a pesar de la relevancia de contar con dicho instrumento para que la ciudad crezca tomando en cuenta al medio ambiente, al día de hoy el Ayuntamiento de Culiacán incumple a los culichis con está herramienta que ayudaría a promover un crecimiento ordenado del municipio y un medio ambiente sano y resiliente.

A este respecto, la directora de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Culiacán, Cecilia Acosta, señala que “siempre se ha hecho el intento” de generar está herramienta, pero que estos han sido infructuosos por la negativa de destinar recursos por parte de las autoridades.

“Se necesita una inversión de varios millones para trabajar. Siempre se ha hecho el intento, siempre hemos avanzado; pero cuando llegamos al apartado de decir: Ah, es que se necesitan dos millones de pesos, 4 millones de pesos, pum, ahí se detiene”, reconoció.

 

Mientras tanto, el crecimiento de la ciudad sigue sin tomar en cuenta las condiciones ambientales del municipio. “Te pongo un ejemplo muy claro: El Cerro de las Siete Gotas tiene ahorita un gran problema de deforestación”.

“Si existiera un Programa de Ordenamiento Ecológico Local, no tuviéramos la necesidad de iniciar un nuevo trámite con el Cerro de las Siete Gotas para declararlo Área Natural Protegida ¿Por qué? Porque en el programa que rige los usos de suelo para el municipio de Culiacán están el Cerro de las 7 Gotas, el Cerro del Tule y Mojolo como zonas de conservación, pero por el Programa Municipal de Desarrollo Urbano, y este documento no es un elemento suficiente para decir allí no te metas a desarrollar. No es una capa de protección que esté por encima de”, explicó.

“Si tuviéramos el programa de ordenamiento ecológico local esta parte que está como conservación se queda como conservación”, sentenció.

 

El PACMUN: doblemente no publicado

 

Otra instrumento de política pública que sí se generó para Culiacán pero que nunca fue publicado “ya que no contó con la aprobación del cabildo municipal, debido al cambio de administración y a la discontinuidad del proyecto” fue el Plan de Acción Climática Municipal (PACMUN) elaborado en el 2013. Posteriormente, en el 2018 se creó otro PACMUN que, a decir de Cecilia Acosta, estaba muy avanzado, pero tampoco se publicó.

“Estuvimos trabajando con los compañeros coordinados con el plan este para la actualización de dicho documento. ¿Qué pasó que no se logró publicar? Ahí sí lo desconozco”, lamentó Cecilia Acosta.

 

Estos documentos, hicieron una evaluación de emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI) por sus fuentes en el municipio y propuso medidas de mitigación para reducir las emisiones de los mismos. Pero irresponsablemente, el trabajo realizado para su elaboración quedó en la nada.

Sin embargo, actualmente el Instituto Municipal de Planeación (Implan Culiacán) incluye al PACMUN en su Programa de Trabajo 2024 como parte de los trabajos de coordinación interinstitucional.

Así, según el calendario del Implan, entre abril y agosto de este año se trabajará en la actualización del marco institucional y del inventario de emisiones de GEI en el municipio; en septiembre sería presentado a la Comisión de urbanismo, ecología y Obras públicas, y en octubre se definiría un marco de actuación para el Plan.

También puedes leer: